La XXXV edición ininterrumpida del Festival del Caribe que se desarrollará desde este 3 al 9 de julio, estará dedicada a los 500 años de la fundación de la Villa Santiago de Cuba y tendrá a la Mancomunidad de Las Bahamas como país invitadote honor.

En este sentido el Ministro de Juventudes, Deportes y Cultura de esta nación, Honorable Dr. Daniel Johnson, expresó “Estamos muy agradecidos con el partido y el gobierno de Santiago de Cuba, así como a la Casa del Caribe por esta dedicación. Nosotros tenemos muchas cosas en común, incluso más de lo que imaginamos. En Las Bahamas profesamos admiración y respeto por la cultura cubana”.

“Es un reto enorme, más aun, cuando la Villa cumple medio milenio de fundada. Deseamos que este evento se convierta en otra revolución, en el corazón, en la mente y en la economía, pero también, a nivel cultural”.

“Aunque Bahamas ha estado presente en otros Festivales nunca se le había dedicado uno, y menos en una proporción notoria como la que esperamos tener, este país tiene una cultura muy rica y un carnaval que es referencia para el Caribe.”

La celebración será “una gran oportunidad para la unidad caribeña y para mostrar nuestra historia como pueblo”.

Se prevé la delegación del país tenga alrededor de 150 artistas de las diferentes manifestaciones populares, como música, fotografía, arte culinario, poesía, danza.

El mandatario expresó además la alegría por “La firma de un convenio de colaboración entre ambos países en materia de cultura” que será sin dudas, una vía más para fortalecer los vínculos de hermandad entre los dos pueblos.

Por su parte, Alma Adams, Embajadora de ese país en Cuba, dijo que su delegación ofrecerá una panorámica artística que acercará aún más a ambos pueblos, pues aunque no comparten el mismo idioma, tienen muchos nexos.

Adams manifestó su satisfacción con la ciudad de Santiago de Cuba, especialmente por la hospitalidad de sus habitantes, y destacó la acogedora imagen que muestra la urbe, en espera del aniversario 500 de la fundación de la villa, una oportunidad única.

Edison Dames, subdirector de Cultura del Ministerio de Juventud, Deporte y Cultura de Bahamas, expresó que traerán al festival bailes tradicionales, poemas, juegos para los niños y ofertas culturales para los jóvenes, así como también platos típicos de la cocina de esa tierra caribeña.

Dames destacó el Junkanoo como expresión danzaria, la cual se presentará en la cita y se disfrutará mucho, pues además de sus ritmos atractivos y muy variados, sobresale por emplear instrumentos musicales confeccionados con cuero de carnero y otros materiales originales.

“Cuba es un país de tambores, y como compartimos las raíces africanas, ofreceremos aquí ese toque, para demostrar la forma en que nos comunicamos a través de ellos y que nos distingue”, refirió Dames.

Bahamas, es un país constituido por más de 700 islas, cayos e islotes en el Océano Atlántico; al norte de Cuba y Republica Dominicana, noroeste de Islas Turcas y Caicos, al sureste del estado estadounidense de Florida y al este de los Cayos de la Florida.

A solo 12 millas de nuestro archipiélago  comparte historia e identidad con Cuba, una razón más para destacar estos lazos y estrechar relaciones con la ayuda de un Festival que ha sido escenario para el fortalecimiento de los nexos entre pueblos de la región, apuntó por su parte Orlando Vergés, director de la Casa del Caribe.

Este festival es el más grande de su tipo en Latinoamérica, un espacio para el encuentro de todas las expresiones de la cultura artística, en defensa de la identidad. Un acontecimiento para que se expresen la solidaridad, diversidad, amistad y la esperanza.

Esta institución, que organiza desde 1981 estos encuentros, será una vez más nexo entre  los más de mil participantes extranjeros, artistas e intelectuales,  que ya han confirmado su asistencia, procedentes de una treintena de países del Caribe, Latinoamérica y Europa, una representación de Turquía y de estudiosos y grupos portadores de la cultura popular tradicional de Cuba.

Este año será especial –enfatizó Vergés- porque estaremos festejando cinco siglos de la fundación de la Villa de Santiago de Cuba, y que con la inauguración de nuestro evento, comiencen las celebraciones principales por este aniversario.

Uno de los momentos más significativos del evento será la creación de la Red de Carnavales del Caribe, una iniciativa auspiciada por la Asociación de Estados del Caribe en pos de enaltecer esa expresión musical y danzaria de fuerte arraigo entre los pueblos de la región.

Otra jornada relevante será la entrega de los Premios Internacionales Casa del Caribe al poeta cubano Waldo Leyva, a fundadores del encuentro y al junkanoo, manifestación musical y bailable autóctona de la Mancomunidad de Las Bahamas, a cuya cultura se consagrará esta edición 35.

El Coloquio "El Caribe que nos une" será el espacio teórico fundamental, al que se sumarán el taller de religiosidad popular, el encuentro de jóvenes creadores Almas nuevas, los desfiles de la serpiente y el fuego, las fiestas haitiana y antillana, el homenaje a la rebeldía esclava y la oda a Yemayá.

Sesiones teóricas, talleres, desfiles populares, galas y homenajes serán algunas de las propuestas del esperado Festival, que este año coincidirá con la celebración de los 35 años de los Estudios Siboney de la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales, que también han contribuido al rescate de grupos portadores de tradiciones del llamado Gran Caribe.

La Fiesta del Fuego abrirá en el mes de julio las festividades, que tendrán puntos culminantes el día 25 con el advenimiento de los 500 años y el 26 con la conmemoración de los 62 años del asalto al Cuartel Moncada, protagonizado en 1953 por jóvenes revolucionarios encabezados por Fidel Castro.