En la madrugada del 23 de agosto de 1906 caía asesinado por el cuerpo de la Guardia Rural el general de división del Ejército Libertador Cubano José Quintino Bandera Betancourt “Quintín”. El infausto hecho ocurría en la finca Garro, localidad rural de Torrens, en las cercanías del pueblo de Guatao, entonces término municipal de Bauta y desde 1976, perteneciente a La Lisa.

Se dice con razón que fue una muerte alevosa y es cierto, fue ejecutada por el capitán Delgado que había sido su subordinado en la última contienda libertaria contra España y ordenada por el mayor general Alejandro Ramírez, a la sazón, jefe de la Guardia Rural, otro compañero de armas del mambisado.

Quintín fue general de las tres guerras por la independencia en treinta años (1868-1898) pero más, fue combatiente de cinco contiendas pues en 1851 estuvo entre los alzados con Joaquín de Agüero, sublevación que se extendió desde Puerto Príncipe hasta el norte de la región oriental y su quinta ocasión fue precisamente la Guerrita de agosto de 1906 en que cayó, primera de las guerras civiles de la república neocolonial.

Jefe de la infantería invasora desde Mangos de Baraguá hasta Mantua a las órdenes de Antonio Maceo entre 1985 y 96, Jefe de la brigada Trinidad del 4to Cuerpo de Ejército Las Villas terminó la guerra en el 98 con grado de brigadier (general de brigada) pero la Asamblea de Representantes de la Revolución, le reconoció el grado de general de división antes del licenciamiento del Ejército Mambí.

Había nacido el 30 de octubre de 1834 en Santiago de Cuba, contaba sólo 17 años cuando se alzó contra el colonialismo español con las huestes de Agüero, 34 cuando se hizo mambí, 64 cuando concluyó la última guerra contra España e iba a cumplir 72 cuando fue asesinado. Toda una vida dedicada a luchar por la libertad.

Varias calles, escuelas, centros deportivos e industriales en distintas ciudades y pueblos del país llevan el nombre del héroe, nunca olvidado por su pueblo y ha sido recibida con agrado la noticia de la Oficina de Monumentos y Sitios Históricos de La Habana acerca de la reconstrucción de su última morada en la calle Esperanza No. 106, entre Águila y Revillagigedo, en la barriada de Jesús María, en La Habana Vieja, que será el centro cultural Quintín Bandera para beneplácito de las amalianos –gentilicio que emplean los vecinos de Jesús María– que tanto han ansiado que se le devuelva la vida a ese  inmueble destruido por el tiempo.

Igualmente, se encuentra en proceso de elaboración el expediente para la declaratoria como Monumento Nacional del sitio en que cayera, lugar además, donde se reemplazará la actual escultura por otra más significativa. Todo ello, formando parte del Programa Nacional contra el racismo y la discriminación racial.

Mientras, cada año por esta fecha se le rinde homenaje al popular general en la majestuosa estatua que le dedicara el escultor Gelabert en el Parque Trillo, del barrio de Cayo Hueso y en la tumba donde reposan sus restos en la necrópolis de Cristóbal Colón.