De trascendente puede evaluarse el panel que bajo el título Bahía de Cochinos? visiones encontradas en un nuevo aniversario, tuvo lugar en la tarde del 21 de abril, auspiciado por el Instituto Cubano del Libro y la Sección de Literatura Histórica y Social de la UNEAC, presidida por la Dra. Ivette García, como parte de la actividad que viene realizando  el Grupo de Trabajo sobre la Revolución Cubana, perteneciente a dicha sección, que encabeza el Dr. Juan Valdés Paz, Premio Nacional de Ciencias Sociales,.

La actividad se inició con la presentación del documental de, Jorge Osmani Morales Pérez La batalla aérea de Playa Girón, valioso testimonio de su realizador, quien desconocedor de la técnica y sin medios profesionales, logró reconstruir, de manera artesanal, la hazaña realizada por los pilotos que participaron en la guerra contra los invasores, con pocas o ninguna actividad práctica anterior, quienes contribuyeron con valentía y amor patrio, a la derrota de los invasores

El estremecedor y esclarecedor material, expresión del heroísmo desplegado por nuestros pilotos, dio paso al panel que, bajo el título de Bahía de Cochinos: visiones encontradas en un nuevo aniversario,  integrado por destacados estudiosos de nuestro país, descubrió nuevas aristas del acontecer en aquellos días en Bahía de Cochinos, sus antecedentes, los acontecimientos y muy especialmente, la condición de estratega de muestreo Comandante en Jefe Fidel Castro; quien desde la preparación para la posibilidad cierta de una invasión, desde los meses anteriores venía preparando al país en general y a sus fuerzas armadas en particular, para enfrentar a la misma, detallándose cómo fue modificando esa estrategia hasta concluir en que el ataque enemigo se produciría por Matanzas, dando las orientaciones precisas para la preparación de dicha provincia, y en especial a la zona de Bahía de Cochinos, para repeler la invasión.

En importante narración de Juan Carlos Rodríguez, testimoniante de aquellos hechos y actual director de la editorial Capitán San Luis, se refirió a numerosos detalles inéditos de aquella gesta y, en su valiosa exposición, explicó como Fidel, unas horas antes, llegó a la conclusión de que la entrada de los invasores se produciría por Palpite y fijó las orientaciones precisas, exactamente como ocurrió.

El Doctor en Ciencias Históricas Andrés Zaldívar, investigador y Presidente de la Unión de Historiadores de Cuba en su Filial de La Habana, hizo un enriquecedor análisis de los estudios que, sobre la epopeya de Playa Girón, se han realizado desde el propio año 1961 por estudiosos nacionales y extranjeros, así como en informes de organismos gubernamentales y de investigaciones de los propios Estados Unidos, mostrando otra importante arista de las ?visiones encontradas? que aún siguen siendo objeto de investigación y análisis, con el consecuente aporte de nuevas valoraciones y conocimientos sobre aquella epopeya que refrendó, pueblo mediante, el camino socialista de nuestra Revolución, hace 55 años.

Concluyó la labor del panel el General (r) Fabián Escalante, quien aportó importantes elementos inéditos o poco conocidos con respecto a la labor de la inteligencia militar cubana durante aquellos años primeros, que logró descubrir, inclusive, los gravísimos atentado contra el Comandante en Jefe que se produjeron entonces, así como detalles del programa de acciones entre la población que supuestamente apoyarían el desembarco de la Brigadas 3506, destacando que la esencia de la estrategia militar de Fidel estuvo basada, otra vez, en la movilización del pueblo, lo que se hizo evidente cuando en su discurso en el entierro de las víctimas de los bombardeos, el 16 de abril de 1961, en su llamado al combate, orientó? "cada cubano debe ocupar el lugar que le corresponde…", fuerza indiscutible en la cual el Partido, el Estado y la dirección histórica de la Revolución, junto a las nuevas generaciones, sostienen la existencia y avance de nuestra Revolución hacia nuevas transformaciones.

Terminadas las exposiciones, los presentes en la sesión realizaron también importantes intervenciones, entre ellos, algunos testimoniantes que dieron nueva luz con respecto a aquel acontecer a partir de elementos hasta ese momento desconocidos, así como de algunos de nuestros teóricos, entre ellos Rafael Hernández, politólogo y director de la revista Temas, quien retomando una opinión del panelista Zaldívar, expresó que se debe analizar el calificativo de mercenarios que se le atribuye de manera general a los integrantes de la Brigada 2506, pues si bien es cierto que fueron financiados por intereses foráneos, y entre ellos había asesinos profesionales y otras especies de antisociales, no lo es menos que muchos procedían de familias burguesas, representantes de un régimen derrotado por la Revolución y que vinieron a restablecer aquel estatus, por tanto, había un sentido clasista en su decisión de invadir al país.

Esta idea justamente se corrobora en un trabajo aparecido en El Heraldo de este 22 de abril, diario digital que edita Néstor García Iturbe, suscito por Edmundo García, bajo el título de? El “museo” de la derrota en Miami, una de sus conocidas Estampas de Miami, que publica en su sitio La tarde se mueve.

En dicho trabajo, el periodista de origen cubano radicado en Miami, como reafirmando lo destacado por Rafael Hernández, relata cómo los sobrevivientes de la Brigada, a cargo ahora, entre otros, del asesino del Che, Félix Ismael Rodríguez,  acaban de inaugurar en ciudad de Hialeah Garden, el llamado “museo” de la Brigada 2506, que no es más que el museo de la derrota, en el cual se exponen piezas que en su mayoría son réplicas de dudosa autenticidad, objetos falseados desde su propia denominación y hasta una réplica de uno de los aviones de Hermanos al Rescate, la organización contrarrevolucionaria que, bajo la dirección de José Basulto, estuvo a punto de provocar un serio incidente internacional entre Cuba y Estados Unidos, de peligrosas consecuencias para ambos países.

Aunque el analista García sigue denominando mercenarios a los miembros de la moribunda Brigada, afirma que?

"De los más de mil mercenarios 800 pertenecían a familias ricachonas y su objetivo al invadir Cuba era recuperar sus privilegios; y que otros 135 eran ex militares o ex miembros de los servicios represivos de Batista. Esa es la gran verdad, que fueron a luchar por ventajismo material y no por la libertad. Pero esto seguramente lo va a esconder el llamado “museo” de los mercenarios derrotados en Playa Girón".

Esta afirmación corrobora lo afirmado por el destacado investigador cubano Rafael Hernández, opinión que a mi juicio, por los numerosos elementos de estudio existentes, es necesario incluir en la conceptualización de aquella brigada y sus trasnochados objetivos. Ellos demostraron, además de su procedencia, representatividad y objetivos, que poseían mucho apego a sus propias vidas, a sus intereses y ninguno a la patria que un día los vio nacer, razón por la cual un pueblo digno, revolucionario y defensor de su historia, bajo la dirección de su Comandante en Jefe, no tardó más de 72 horas en derrotarlos.