Hay hombres cumbres, con los que se alzan los pueblos; signos densos con los que se identifican y miden sus hijos. Con sus actos se narran, desde sus sueños, empinan sus expectativas.  Eso significan para los cubanos Carlos Manuel de Céspedes y José Martí.  Dos poetas mambises, conectados por el empeño de ver a su tierra libre, por capilaridades históricas ya anotadas y  otras más sutiles; entretejidas en otro símbolo, tan sobrio y tan rico en  intensidades, como ellos mismos. Una escarapela, que por feliz decisión del Ministerio de Cultura, fue el símbolo central de la pasada Jornada de la Cultura Cubana y de su extensión,  la Campaña Comunicacional El Mambí. Intencionalidad que armoniza con el sentido de continuidad de la Revolución que hoy defendemos. Nacida con las primeras luces del 10 de Octubre de 1868, con la proclama de Céspedes en La Demajagua, continuada por Martí, desde el 24 de Febrero de 1895,  y que desbordó de esperanza fidelista a Santiago, el 1 de Enero de 1959.

Precisamente, en calles santiagueras se intentó  deshonrar, “en ignominiosa procesión”,  al fiel amigo de Céspedes, Perucho Figueredo; pero a las balas coloniales -a las de hierro  y a las simbólicas- enfrentó el bayamés con los versos de su canto de guerra: “¡Morir por la Patria es vivir!”. Lo narró así El veterano, en el número 16 del periódico Patria, fundado por Martí para su campaña comunicacional por la libertad  de Cuba. Al Movimiento Independentista le faltaba un Himno. Ya tenía Partido, el Partido Revolucionario Cubano, nacido el 10 de abril de 1892, para conectarse simbólicamente con aquel día luminoso, en que en el Guáimaro camagüeyano la “Revolución entró en la República”. ¿Y cuál mejor que “El Himno de Figueredo”, como lo identificó Martí en ese mismo número de Patria? 

El “Himno de Bayamo” que conoció Martí con los emigrados cubanos en La Florida, con el que lo recibían, entre vítores y fervoroso entusiasmo, antes de escucharle su metáforas del arranque, sus apasionados  y patrióticos discursos. Compuesto por Perucho, el 14 de agosto de 1867 en el ingenio Las Mangas, tocado por primera vez en público el 11 de junio de 1868, dentro de la iglesia mayor de la villa, y cuya letra fue popularizada el 20 de Octubre de ese glorioso año. Fecha en que por acuerdo  Consejo de Ministros, del 22 de agosto de 1980, fue elegida para “conmemorar anualmente el surgimiento de la cultura cubana: independentista, antiesclavista, antimperialista y proyectada hacia el progreso social”.

La Campaña #ElMambí, tiene esos referentes, desde la Jornada de la Cultura Cubana.  Así lo anunció el director de Comunicación del Ministerio de Cultura, Alexis Triana, al lanzar oficialmente la campaña a través del programa Buenos Días de Cubavisión.  Del 10 al 20 de octubre pasado, se integraron diversas instituciones del Ministerio, para rendirle homenaje  y celebrar el legado de Alicia Alonso (1920-2019),  festejar los 90 cumpleaños de la Novia del Feeling, Omara Portuondo, y del Premio Nacional de Artes Plásticas 1997, Alfredo Sosabravo. También, las cinco décadas de un  mambisito con el que crecimos muchos cubanos, Elpidio Valdés, historieta y personaje animado creado por el ingenioso Juan Padrón (1947-2020)  y que encarna la rebeldía del pueblo cubano. 

Con las etiquetas #CubaEsCultura, #LaTierraDeMisAmores, #ConLaMismaEstrella, #Elpidio50 #MuchoMachetePorDarTodavía y por supuesto #ElMambí, desde las cuentas en Facebook e Instagram del Ministerio de Cultura (MINCULT), el Instituto Cubano de la Música (ICM), los consejos nacionales de las Artes Plásticas (CNAP) y Escénicas (CNAE), la Universidad de las Artes (ISA), entre  otros perfiles institucionales y personales, se inundaron las redes sociales con la escarapela de Céspedes y de Martí.

Un poco antes, en el verano, se había lanzado a conquistar canales y sensibilidades la campaña  #MuchoMachetePorDarTodavía,  por  cumplirse el 14 de Agosto, cincuenta años de la primera publicación, en la revista Pionero, del emblemático Elpidio Valdés. La campaña tuvo, entre sus novedades,  la publicación de stickers con las frases míticas de la serie y el estreno de un sitio web con información sobre cada uno de los personajes y otros datos de interés sobre Juan Padrón, Premio Nacional del Humor (2004) y de Cine (2008).

No es casual que el spot que identificó esta campaña, tuviera como principal motivo de Elpidio Valdés  y se montara sobre el fragmento del tema “Yo soy el punto cubano”, la versión que hiciera David Blanco del emblemático tema de Celina González, e incluida en  la campaña comunicacional que a propósito concibió y organizó el Ministerio de Cultura, con los hastag #PorLaVictoria #ConLaMismaEstrella  y #LaTierraDeMisAmores. 

Tampoco que el pasado 20 de octubre, fecha en que se cantó en el Bayamo irredento el Himno Nacional Cubano, se estrenara un adelanto del videoclip con el tema “El mambí”, enarbolado con la  voz y su guitarra por el fallecido trovador Santiago Feliú y reforzado con el piano del maestro Frank Fernández.  Una perla de nuestra concionística creada por un mambí, Luis Casas Romero.  La versión definitiva, se presentó el 25 de diciembre. Se cumplió lo que anunció su director Roly Peña: “Lo más importante de este video es el honor que hacemos a la historia y a la cultura de nuestro país”. “Lograr el amor por lo épico”. “Lo único que vamos hacer es asentar el sentido patrio que tienen los jóvenes de hoy”.  

En el marco de la campaña varios han sido los audiovisuales producidos y publicados. La semana pasada, se socializó  la Conga de Virulo "Con Cuba no te metas", en la que participaron varios exponentes de la  música,  entre los que se destaca la santiaguera Conga de Los Hoyos.  Hace unas horas, comenzó a circular  otra conga  "Vamos que de esta salimos", del popular Cándido Fabré. También se ha anunciado un videoclip que recrea el tema  "Tumbao", del grupo Moncada,  y "Paráfrasis del Himno Nacional", de Frank Fernández. Genuina celebración de una vital cubanía. 

Diversas han sido las propuestas desde las instituciones de la cultura,  para esta   Jornada Triunfo de la Revolución, siempre atemperadas a las condiciones que impone la situación epidemiológica. El Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) preparó un ciclo de películas y documentales emblemáticos de la filmografía nacional, como y Como la vida misma (1987), de Victor Casaus;  Casa Vieja (2010), de Lester Hamlet; Nosotros, la música (1964), de Rogelio París; Omara (1983), de Fernando Pérez; Obataleo (1988), de Humberto Solás, y Buscando a Chano Pozo (1987), de Rebeca Chávez.

Los 60 años de fundación del  ICAIC, una de las instituciones creadas en los momentos fundacionales de la Revolución, fue una de las motivaciones de la pasada campaña.  También,   el aniversario 60 del Triunfo de la Revolución Cubana, el bicentenario de Carlos Manuel de Céspedes,  el 120 de Rubén Martínez Villena, y los  centenarios de Santiago Álvarez y de Benny Moré,  exponentes trascendentes  de nuestra cultura. 

La escarapela tejida por manos bayamesas,  obsequiada al Padre de la Patria y que portaba Martí al caer en Dos Ríos, fue enarbolada desde entonces como icono de la campaña, aunque para este 2020, fue destacada su estrella. Gesto que la conecta con anteriores campañas; con la que tomó la estrella de la Silla de Maceo como símbolo identificativo,  y con la campaña por la Jornada de la Cultura del  2018, la de  #ConLaMismaEstrella, dedicada a los 150 años del inicio de las guerras de independencia.  Claras evidencia de la ya señalada continuidad.