Habana Selfies, la película de Arturo Santana, tuvo su premier en el cine Chaplin. El filme es uno de los homenajes del Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos, y de su director, al aniversario 500 de la fundación de la capital cubana.
La cinta, de 90 minutos, es una comedia urbana que por momentos es un drama con enfoque melancólico y sensual o un musical, y se estructura en seis relatos que constituyen autorretratos de La Habana; funciona en montaje paralelo que tiene como punto de partida un viaje en automóvil por La Habana nocturna que se interrumpe, y entra cada cuento que transcurre en diversas locaciones con personajes y situaciones universales y contemporáneas.
Habana Selfies tiene al amor y a La Habana como hilos conductores, porque «La Habana es una ciudad llena de amor», aseguró Santana en conferencia de prensa realizada en el Centro de Promoción Cinematográfico Fresa y Chocolate. A propósito de los múltiples guiños e intertextualidades cinematográficos y literarios que aparecen en el filme, explicó que para él, el cine tiene mucho más que ver con la literatura que con cualquier otra de las artes. más que ver con la literatura que con cualquier otra de las artes.
Más adelante confesó: «Intenté por todos los medios, ser sincero con mi ciudad que es el escenario de todas las cosas que he hecho y que no he podido hacer» y en otro momento de su intervención dijo que un objetivo fue además poner a La Habana a la altura de las grandes ciudades, a través del amor, del enfoque de tributo a toda su historia.
Dos fortalezas indiscutibles de Habana Selfies son la fotografía, del experimentado y multipremiado Alexander González, y la música original que es de la autoría del reconocido instrumentista, arreglista y productor Germán Velazco.
Ambos elementos son protagonistas de la cinta; hay un tema melódico central que es el hilo conductor, cuya letra es de Santana, y Velazco musicalizó; este tema aparece en varios géneros musicales que los actores cantan y bailan: Corazón aventurero.
Acompañaron a Santana en el encuentro con la prensa, Carlos de la Huerta, el director de producción, algunos de los miembros del staff técnico y varios de los actores, entre ellos Roque Moreno, Max Alvarez, Leonardo Benítez, Yeny Soria, Mayelín Barquimero y Yía Caamaño, los cuales coincidieron en agradecer la oportunidad de trabajar en el filme y compartieron algunas anécdotas del rodaje y de la experiencia de la dirección de Santana.
Roque Moreno, hizo una interesante reflexión acerca de Habana Selfies al explicar qué lo enamoró de la misma:
«Una película cubana que no es un choteo ni es nada peyorativo, ni va al cubaneo barato, o sea, es una película de sentimientos (…) me parece que La Habana necesita películas así, que cuando la gente la vea diga fui a ver una película, no una crítica de la bodega, ni una miseria constante… está La Habana como está, desbaratada por supuesto y con todo pero hay historias preciosas».
Santana reveló: «Yo estoy verdaderamente muy feliz, no solo por haber rodado mi segunda película en La Habana sino por los resultados audiovisuales, y por los actores y el equipo». Anunció que durante el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano la película tendrá una presentación especial el 9 de diciembre a las ocho de la noche en el cine Yara, y que su estreno nacional será el 20 de diciembre; convocó a los espectadores cubanos a disfrutar su cinta en pantalla grande como lo merece una extraordinaria visualidad como la que logró Habana Selfies.
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