El recientemente concluido Concurso Nacional de Coreografía e Interpretación Danzan Dos 2014, trajo muy buenas nuevas al movimiento danzario guantanamero, uno de los más prolíficos del país, a pesar de ser el más alejado de la capital.

En la oncena edición de este foro, Danza Fragmentada, compañía habitual por su participación, se llevó “el gato al agua” en la mayoría de los apartados de la competición. Entre los galardones, la agrupación que dirige desde su fundación hace 21 años el maestro Ladislao Navarro, obtuvo el Premio de Coreografía por la obra Carlos y Blondie, del coreógrafo Esteban Aguilar, esta vez compartido con Danza del Alma. Asimismo el Premio de la Popularidad, por Breve Historia de Insectos, pieza que además obtuvo el Premio Concordia, que otorga la Asociación Hermanos Saíz en Matanzas.

La calidad de los jóvenes intérpretes guantanameros también quedó fuertemente evidenciada en la cita bienal. El primer bailarín Aurelio Planes ganó el Premio de Interpretación Masculina, a la vez que Inés María Preval, Gretel Córdova y Esteban Aguilar merecieron respectivas menciones en esa categoría. Este último creador, reconocido bailarín y coreógrafo, conquistó el Premio al Mejor Intérprete, que concede el grupo Teatro Icarón.

Una veintena de composiciones coreográficas engrosaron la programación de la muestra concursante, puesta a consideración del jurado, presidido por Miguel Cabrera, Historiador del Ballet Nacional de Cuba, e integrado por destacadas personalidades del ámbito danzario como Silvina Fabars, Premio Nacional de Danza 2014; Lilian Chacón, Profesora Titular de la Universidad de las Artes; Suki John, figura internacional de la danza y  Liliam Padrón, Directora de Danza Espiral, organizadora del encuentro.

Talleres, galas homenaje, así como espacios de diálogo y confrontación,  completaron la agenda del Danzan Dos, que estuvo sesionando principalmente, desde el escenario del cine-teatro Velasco, de la Atenas de Cuba.