La ceremonia de premiación de la XXI Feria Internacional de Artesana Fiart 2017, dedicada a la provincia Santiago de Cuba y al vidrio como manifestación, tuvo lugar en el recinto ferial Pabexpo, sede del evento que cada año organiza el Fondo Cubano de Bienes Culturales.

Esta apertura sirvió de contexto idóneo para la entrega al artista Gonzalo Córdoba por parte de la Fundación Caguayo del premio Crecemos, que consiste en una réplica de la escultura Martí crece, del maestro Alberto Lezcay, tomando en consideración que la vida del creador ha estado consagrada al diseño cubano; la cubanía contemporánea de sus trabajos y su interés por desarrollar un diseño con materiales locales, con sentido de lo bello, racionalidad económica y reflejo de los valores y códigos nacionales.

Este reconocimiento distingue a personalidades, proyectos artísticos e instituciones cuya obra creativa, formativa, reflexiva o promocional ha sido prominente dentro del ámbito de la cultura artística y literaria del país.

El jurado de Producto, presidido por el artista de la plástica y crítico Manuel López Oliva antes de dar a conocer su veredicto, afirmó, entre otras consideraciones, que: «El hecho mismo de que FIART se haya logrado mantener aun en circunstancias  difíciles, demuestra la legitimidad de su existencia como una de las vías de influencia de la cultura en el desarrollo económico social» y además señaló que «se mantiene el rango de valor alcanzado por un alto número de productores» y finalmente advirtió que siempre se ha soñado que FIART sea «una especie de Rosa de los vientos para las diferentes producciones nacionales».

Se entregaron reconocimientos especiales en este apartado a los artistas: Eduardo Aragonés y Mayelín Guevara; menciones a Irina Fondén,Gloria Nápoles, Carmen Rosa Pérez, Luis Fariñas y Madariaga Caprichos de Madrid, de España.

Se confirió el Premio FIART al Taller Piolín, de Uruguay, «por ser una ingeniosa y lúdica apropiación de las tradicionales calabazas derivadas en artefactos móviles y generan una opción peculiar para la fantasía infantil».

El jurado lo entregó además al artesano Gregorio Jorge Duménigo del Castillo, de Villa Clara, teniendo en cuenta «el virtuoso y preciso modo de usar las conchas y caracoles con fines casi escultóricos y a la vez sacramentales»; este creador recibió en la apertura del evento un Reconocimiento Por la obra de toda la vida.

Igualmente, «en virtud del diversificado uso del mosaico que origina hermosas composiciones ornamentales a veces también utilitarias» alcanzó Premio FIART el Grupo Mosaicos Habana, al igual que Sergio Dávila, de Santiago de Cuba, gracias a su «renovada modalidad del vidrio en dos y tres dimensiones con influencia de la abstracción geométrica provista de un exacto ajuste entre diseño y tecnología».

El tribunal del Premio FIART de Diseño, tuvo a bien conceder un reconocimiento especial al Diseño de Identidad de FIART 2017, de  los diseñadores Camila Lima y Alejandro Rodríguez, atendiendo a «la adecuación temática integralidad y calidad formal y funcional de las soluciones».

Fue Mención en esta categoría el mueble multifuncional de cocina, realizado por Muebles Carballosa, pues el jurado valoró la funcionalidad, depuración formal y acabados de la pieza.

Los galardones de Diseño recayeron en Gilberto de la Rosa (Betico) porque su sillón  logra reinterpretar los códigos del mobiliario cubano tradicional con excelente factura, acabado y confort; Roberto Ripoll, por su conjunto de mesa y silla, ejemplo de aprovechamiento de partes y materiales reciclados y que destaca por lo vernáculo y su capacidad de adecuarse a disimiles contextos, y en el grupo Aldecoa, por su multimueble en el que se aprecia un cuidado impecable de los acabados, empleo de soluciones de uniones y combinaciones de madera que se integran al lenguaje formal contemporáneo, sencillez, elegancia y versatilidad.

Los lauros de diseño de stand fueron conquistados por Almacenes Mata, de Raúl Mata, en el que se destacó el excelente aprovechamiento del espacio, las estructuras y el modo de almacenar los productos en un diseño formalmente coherente.

Roberto Ripoll, alcanzó por el diseño de su stand su segundo Premio FIART en esta edición; el jurado destacó « la conexión entre soportes y productos en un diseño en el que se aprovecha de manera óptima el espacio mínimo en un equilibrio formal y funcional».

Este tribunal, a la par concedió menciones al stand de Conga y al de Zulu e hizo un llamado a los expositores a  propósito de la importancia de un adecuado diseño del espacio por la trascendencia de este como contexto y soporte de los productos a comercializar.

Mercy Correa, directora del Centro Nacional de Artesanía del FCBC, en una intervención final resaltó los resultados económicos del evento y expresó la satisfacción de los organizadores además por el reconocimiento obtenido por los creadores de la imagen de la feria y de todos los laureados y anunció que FIART 2018 estará dedicado al mueble artesanal, un producto de gran tradición en Cuba, y a la provincia de Villa Clara.

Premiados:

Este acto contó con la asistencia de Guillermo Solenzar, viceministro de Cultura, Pedro de la Hoz, vicepresidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, Arturo Valdés Curbeira director el  FCBC, otros especialistas y funcionarios de esa institución y de la Asociación Cubana de Artesanos Artistas (ACAA), artistas e intelectuales cubanos y de una delegación cultural de Mozambique.

Publicado: 16 de diciembre de 2017.