Hablar de Jornada de la Cultura Cubana en un país con tanta riqueza en la música, la pintura, la danza, las letras y otras tantas manifestaciones artísticas, no puede ser menos que una fiesta en la cual cada uno de los participantes aporte su mejor agasajo a esta mezcla de arte y conciencia nacional.

Instituida la conmemoración mediante el Decreto No.74 de agosto de 1980, se enaltece el 20 de octubre como parteaguas de una nación que decidió ser libre del yugo español y que en este preciso día entonó nuestro Himno Nacional en su primera ciudad liberada y luego quemada antes de caer nuevamente en manos enemigas, Bayamo.

El termino cultura puede considerarse polisemántico. Cada cual dará su propia definición según su formación o apego en mayor o menor medida a lo bello. Me gustaría definirla como la práctica humana que busca expresar la grandeza de la belleza estética en cualquiera de sus manifestaciones.

Nuestro país ha dado verdaderas estrellas al firmamento de la cultura nacional y universal. Lezama Lima y Dulce Maria Loynaz en la literatura, Mariano y Portocarrero en la plástica, Lecuona en la música, para muestra un botón. No por ello se ha descuidado esa riqueza popular que nos legó Juan Formell, Benny More y todo el imaginario nuestro como nación.

También a nuestra isla ha llegado lo más trascendente del arte universal. Cantaron músicos de la talla de Frank Sinatra y fue de obligatorio retorno para figuras como el Nobel de Literatura Gabriel García Márquez.

Con un avezado conocimiento sobre lo bello, en un inicio se trajo a Cuba arte de los principales centros europeos y norteamericanos que eran el referente de la sociedad colonial de entonces. Contribuyeron en la difusión de este arte foráneo figuras de las clases altas, bien como coleccionistas o como mecenas. Después de 1959 se institucionalizó la promoción y este papel le correspondió al Estado.

Mueble de tocador. Cuba, caoba, siglo XIX-XX. Dimensiones 205 x 130 x 55 cm.

Como ejemplo de esta institucionalización de la promoción cultural es el Museo de Artes Decorativas de nuestro país, otrora residencia de la Condesa Revilla de Camargo, reconocida coleccionista y miembro de una de las familias más acaudaladas de la Habana. Fundado el 24 de julio de 1964, este museo atesora más de treinta mil piezas del mejor arte europeo y oriental, que van desde el siglo XVI al XX.

Paisaje cubano. Autor Esteban Chartrand, óleo sobre lienzo, siglos XX. Dimensiones 35 x 20 cm. Colección MNAD

Nuestra colección está compuesta por obras de los más importantes maestros y manufacturas del mundo. La institución cuenta con piezas de manufacturas europeas y asiáticas tales como Meissen, Sevres, Stafordshire, Aubusson, Imari o Cartier. Importantes artistas como Leonard Boudin, Reissener, Clodion, Weedwood, Chiparus, Tiffany y René Lalique. Pinturas de artistas reconocidos como Cornelius Ceulen Johnson, Louis Tocque y Hubert Robert.

Plato de presentación. Lennos-Tiffany studios, Estados Unidos. Porcelana y esmalte dorado. Diámetro 26 cm

Con el paso del tiempo nuestro museo ha ido desarrollando espacios para la promoción artística más allá del arte decorativo. Ha sido espacio para lo mejor de la música cubana, se han organizado eventos de plástica y literarios y ha llegado esta cultura desde los más añejos hasta nuestros niños.

En la situación epidemiológica actual, no nos hemos quedado cruzados de brazos en la promoción de nuestra cultura. Abrimos nuevas ventanas y ahora también mostramos nuestras colecciones en las redes sociales, sacando provecho de las nuevas tecnologías y poniéndonos en sintonía con la dinámica de los museos a nivel mundial.

Cerámica y esmalte. Amelia Peláez. Cuba. Mediados del siglo XX. Altura 5,7 cm, diámetro 7,8 cm

En la actualidad nos encontramos preparando la exposición de vidrio español en la Habana siglo XVI al XIX, exposición sobre cristal de Bohemia y una colección de abanicos, tazas y muñequitas que pertenecieron a la poetisa Dulce Maria Loynaz.

En este 2020 se dedica la jornada a Omara Portuondo, Alicia Alonso, Alfredo Sosabravo y Juan Padron junto a su popular personaje de animado Elpidio Valdes. La promoción artística es para nosotros una labor de todo el año, pero nos sirven de fiesta estas jornadas de la Cultura Cubana.

*El autor es Museólogo Especialista