De cómo un pueblo, en medio de tantas luchas por su independencia, pudo crear un ritmo que moviera todo el cuerpo acompasadamente y que al paso de los años llegó a imponerse en la arena internacional, fueron algunas de las ideas expuestas en la conferencia magistral sobre este ritmo caribeño, impartida recientemente por el profesor dominicano Rafael Chaljub Mejía a propósito de la semana cultural de República Dominicana en La Habana.

Antes de su disertación sobre la evolución y desarrollo de este estilo nacido a principio del siglo 19, el Embajador de la República Dominicana en Cuba, el Excelentísimo Señor Joaquín Gerónimo, se refirió a las actividades que se realizan en su país y los esfuerzos del gobierno que actualmente encabeza Danilo Medina.

“Para nosotros febrero es un mes muy importante: es el mes de la patria. Hace 173 años, el próximo 27 de febrero, se fundó la República Dominicana, fue el legado de los padres fundadores. Por eso estamos aquí para celebrarlo de la mejor manera: con la fiesta que identifica a los dominicanos: el merengue”, afirmó.

Rafael Chaljub. Foto: Alexis Rodríguez

Por su parte, Rafael Chaljub, uno de los investigadores más acuciosos del merengue en su país y luchador por la independencia dominicana recordó que como la rumba, el merengue fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, título que lo sitúa como un género musical de culto.

La Unesco consideró que el merengue dominicano desempeña un papel activo en numerosos ámbitos de la vida diaria de la población: la educación, las reuniones sociales y amistosas, los acontecimientos festivos e incluso las campañas políticas.

Además de ser expresión de  alegría, el merengue es un elemento que siempre ha estado presente en las distintas etapas de lucha patriótica del pueblo dominicano y en el esfuerzo colectivo por la construcción de su identidad.

Socorro Castellanos, comunicadora y ministra consejera de la embajada dominicana en Cuba. Foto: Alexis Rodríguez

El ritmo, con características propias usa una instrumentación multicultural que contiene melodías de herencia hispana, enriquecido con ritmos africanos, por lo que ha logrado un sonido cautivador, cuyo baile proyecta felicidad, sensualidad y libertad.

A parte de ser uno de los elementos que más distingue la dominicanidad en el mundo, el género no está exento de injerencias occidentales y de algunos “artistas” y productores que en medio de una desaforada comercialización, olvidan su raíz. Preservar su esencia, es compromiso de todos en el Caribe, recalcó.

La presentación de Chaljub Mejía estuvo acompañada de un documental sobre el merengue realizado por Huchi Lora y Juan Delancer.

La semana cultural de República Dominicana en La Habana se extiende hasta el 27 de febrero e incluye la Tercera Muestra de Cine de ese país, exposiciones y la actuación especial del cantautor Víctor Víctor.