Este 29 de abril el mundo celebra el Día Internacional de la Danza y debido a la actual situación epidemiológica que  vive el orbe, las celebraciones tienen lugar a través de redes sociales y medios de comunicación principalmente, aunque diversas acciones puntuales han atendiendo lugar de manera presencial, atendiendo a las medidas impuestas por la Covid- 19. 
En nuestro país, el Teatro Nacional de Cuba, emblemática institución que ha sido testigo del quehacer de numerosas agrupaciones escénicas, acogió un encuentro con destacados exponentes de la danza cubana, quienes fueron reconocidos con la distinción Proeza Laboral que confiere el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura. 
Como parte de las celebraciones por el Día Internacional de la Danza, la Asociación de Artistas Escénicos de la Unión de Escritores y Artistas  de Cuba (UNEAC), desarrolló el panel “Desafíos de la danza folclórica en Cuba”, un encuentro entre académicos y cultores de la danza folclórica de nuestro país, a través de redes sociales,  que posibilitó el diálogo e intercambio en torno a la trascendencia y proyecciones de artistas y agrupaciones en la mayor de las Antillas.
El panel moderado por el periodista y crítico Yuris Norido, contó con la participación de reconocidos especialistas como el crítico e investigador Vladimir Peraza, la investigadora y profesora Bárbara Balbuena, y la tetrologa e investigadora Marilyn Garbey, quieres debatieron acerca del  ejercicio de las compañías folklóricas cubanas, el rol de la crítica ante estas propuestas y la relación de los artistas con el público, entre otros temas de interés del panorama danzario de la isla. 
En el intercambio al que asistieron también bailarines, coreógrafos y directores de agrupaciones danzarias, se analizó además lo que es entendido popularmente como folclore, y en   este sentido se señaló que en escena, la danza folclórica tradicional se reinterpreta en cuanto a movimiento, gestualidad, vestuario, escenografía o recursos técnicos con el fin de llegar al público, por ende, no estamos frente a una imagen pura de las danzas que popularmente se practican con carácter religioso, sino ante una proyección estética escénica y teatral de lo que se conoce como folclore.
Desde otros espacios y plataformas,  las acciones en homenaje al Día Internacional de la Danza han tenido lugar con disímiles propuestas que reafirman la constancia y entrega del movimiento danzario cubano.