El ministro cubano de cultura, Abel Prieto, subrayó hoy que pese a la devastación ocasionada por el huracán Irma el país logró reabrir las escuelas de arte dañadas y salvar los objetos patrimoniales.
En declaraciones a Prensa Latina, Prieto recordó que el fenómeno atmosférico, el más poderoso formado en la cuenca del océano Atlántico, provocó perjuicios a unas 300 instituciones del sector ubicadas en provincias de la costa norte.
Hizo mucho daño, en La Habana la Casa de las Américas sufrió los efectos de las penetraciones del mar, por suerte el entrenamiento que tiene la gente en preservar los objetos patrimoniales, los equipos, permitió que las pérdidas en ese campo fueran mínimas; sin embargo constituyó un golpe duro al sistema institucional, lamentó.
Al hacer un balance de las labores recuperativas el titular de la cartera aseguró que además de restaurar las escuelas, Cuba reactivó la vida cultural en las zonas castigadas.
Dicho meteoro, el cual azotó al archipiélago en septiembre, dejó 10 muertos y causó estragos en viviendas, centros educativos, instalaciones hoteleras, viales, entre otras secuelas.
La respuesta de los artistas fue muy importante, como en otras ocasiones crearon brigadas para viajar hasta los sitios asolados donde había damnificados en albergues, personas que lo habían perdido todo; ellos llevaron un mensaje de solidaridad, de espiritualidad y afecto que va contenido en el arte, enfatizó el intelectual.
No obstante los azotes de Irma —comentó—, 2017 estuvo lleno de eventos exitosos como el Festival del Nuevo Cine Latinoamericano, La Feria Internacional de Artesanía, Cubadisco, el Festival del Caribe, la Feria del Libro (celebrada a comienzos de año) y las Romerías de Mayo.
Interrogado sobre las perspectivas para 2018 el ministro adelantó que uno de los desafíos será garantizar la vida cultural con racionalidad en el uso de los recursos.
“Seguiremos trabajando para mantener la coherencia en la aplicación de una política anticolonial, de defensa de nuestra identidad y de la calidad, para no hacer concesiones a la mediocridad y evitar que nuestras empresas promuevan subproductos, obras de poco mérito por ganancias”.
El objetivo es impedir cualquier deformación, creo que en eso se ha ganado mucho, sobre todo en cuanto a claridad de los conceptos y a medidas concretas, afirmó.
Publicado: 27 de diciembre de 2017.
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