Un enriquecedor y controversial debate generó el Panel La radio: nuevos y viejos desafíos para una práctica comprometida con las audiencias y con la comunidad, celebrado en el Instituto Cubano de Investigación Cultural Juan Marinello (ICICJM).

La Dra. Zenaida Costales Pérez, vicedecana de Postgrado, Investigaciones y Relaciones Internacionales de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana y periodista de Radio Rebelde, y la Dra. Ana Teresa Badía Valdés, profesora de dicha facultad y periodista de la propia emisora, abordaron los cambios y desafíos de la radio ante el nuevo contexto social y tecnológico.

Por su parte, la MsC. Yalena Gispert de la Osa, coordinadora general del proyecto sociocultural para personas sordas Cultura entre las manos, de Habana Radio; el MsC. Alain de la Noval Bautista, profesor e investigador de la Facultad de Comunicación, y la Lic. Ana Lidia García Hernández, coordinadora del proyecto a+ espacios adolescentes y del programa Contigo somos más, de Habana Radio, abordaron la radio comunitaria y su rol en los proyectos socioculturales.

El nuevo contexto de transformaciones en el ámbito tecnológico afecta las rutinas productivas, los formatos, el contenido, la recepción y los soportes de los medios de comunicación. En este sentido, la radio se ha visto afectada igualmente con los cambios en la jerarquización de la información, la necesidad cada vez mayor de participación de las audiencias y su poder para decidir qué escuchar, el abaratamiento de la producción del contenido, la tendencia a la personalización de la información y la consolidación de las plataformas de música bajo demanda.

De unidimensional a multidimensional; de unimedia a multimedia y luego transmedia, la radio se encauza hacia receptores los cuales, al mismo tiempo que consumen, también producen. Algunas comunidades ya son propietarias, creadoras y gestoras de sus propias emisoras.

Al propio tiempo, las plataformas digitales y los dispositivos móviles adquieren una identidad cada vez más reconocible y un protagonismo mayor. La radio en la web multiplica su interactividad y, curiosamente, gran parte de su consumo se localiza hoy en dispositivos móviles como IPhones, Smartphones, Tablets, etcétera.

Con respecto a la radio comunitaria, su eje de identidad puede enfocarse desde la comunicación popular y alternativa. La propuesta va encaminada hacia la innovación en los contenidos, la desjerarquización del proceso de toma de decisiones, la inclusión social, el diálogo intercultural, la identidad grupal, la participación ciudadana y el pluralismo.

Entre sus características se encuentran la producción propia, la cultura autóctona, el servicio público, la participación de los grupos más vulnerables y el tratamiento de temas poco abordados o silenciados. Apuesta, de igual forma, por la búsqueda de la transformación social, la visibilización de actores, el reconocimiento a la diversidad, el rescate de las raíces culturales y la contribución al empoderamiento ciudadano.

Si bien en nuestro país no existen aún emisoras lo suficientemente consolidadas en este sentido, sí se han creado algunas iniciativas por parte de Habana Radio, emisora de la Oficina del Historiador de la ciudad de La Habana. Ejemplo de ellas son los proyectos a+ espacios adolescentes y Cultura entre las manos.

El primero tiene como objetivos contribuir a la mayor inclusión social de los adolescentes en Cuba, articular acciones y actores locales a favor de ellos, construir un centro de adolescentes en la Habana Vieja, y continuar desarrollando talleres y servicios destinados a los jóvenes.

A este proyecto pertenece el programa radial Contigo somos más, realizado por y para adolescentes, que fomenta la participación protagónica y auténtica de este grupo etario con la conducción del espacio por ellos, la realización de entrevistas y la producción de materiales comunicativos como spots, viñetas y reportajes.

Por otro lado, el proyecto intercultural Cultura entre las manos tiene una estrategia de comunicación flexible, que busca el empoderamiento de la comunidad sorda, así como su desarrollo social y humano, difundiendo y promoviendo, además, el patrimonio habanero.