En la Galería Villa Manuela se realizó en la tarde de ayer un conversatorio sobre el grabado en la contemporaneidad cubana, presidido por la directora de dicha institución y crítica de arte Virginia Alberdi y los artistas y profesores Angelmaydelin Calzadilla y Osmeivy Ortega.

El evento tuvo una fuerte presencia de la prensa y de artistas como el grabador Marcel Molina, Harold López, la crítica de arte, profesora y curadora Carina Pino Santos entre otros artistas e historiadores del arte invitados.

El grabado ha acompañado el desarrollo de Cuba desde la fundación de sus primeras villas, fue una de las técnicas empleadas para mostrar a los monarcas europeos como eran estas ciudades, nos explica Alberdi. 

Osmeivy destaca como el concepto de grabado cambió, no se realiza como testimonio; sino por el aumento de la demanda que lo consume a diferencia de antaño que solo era para la aristocracia o burguesías adinerada. La multiplicidad del grabado le hace daño a las creaciones que con tanto esfuerzo son realizadas, prefiero hacerlo como original múltiple, para una mejor valoración del trabajo.

De forma general coincidieron en la charla que existe un privilegio de la pintura sobre el grabado en el mercado.  Igualmente hay una segregación tanto institucional y de los propios artistas del gremio a la hora de realizar las exposiciones. El grabado puede convivir con otras manifestaciones artísticas e integrarlo a la interdisciplinaridad en los diferentes eventos realizados, no verlo solamente desde un taller o una exposición gremial.

La pérdida de eventos que evalúen esta disciplina, la limitada bibliografía, la desconexión entre los distintos grabadores del país y sus trabajos, la falta de promoción a las tesis sobre la temática, sumado a la desmotivación general, hace que la juventud le falte ese ímpetu para su desarrollo. Es increíble como a nivel internacional suceden tantas cosas y nosotros viviéramos en un mundo aparte, comentó Angelmaydelin.

La Contemporaneidad nos da una mayor facilidad para los materiales, no hay la necesidad de un gran taller, solo es tener lo esencial para lo que uno desee crear, explicaba Osmeivy quien aplica su teoría en sus obras, es especial con la técnica de la cuchara, herramienta diseñada por su papá y él. Considero que el futuro es espectacular y más con las nuevas tecnologías a disposición de los más jóvenes, dijo el artista.

También se hizo referencia de la pintora, profesora y grabadora Belkis Ayón que basa su obra en la cultura abakuá y como la retrospectiva de su legado ha sido expuesto en importantes espacios y recientemente en el Museo Reina Sofía, igualmente se habló del Premio Nacional de Artes plásticas y grabador, José Ángel Toirac, entre otros artistas que hicieron referencia.

Para finalizar el espacio Osmeivy Ortega explico el concepto utilizado en su exposición “Una realidad aparte” expuesta en la Galería. Mi concepción está basada en el libro de Carlos Castañeda “Una realidad aparte: nuevas conversaciones con Don Juan” en el cual se abordan dos fenómenos desde distintos puntos de vistas.  Por tanto, mis obras tienen dos lecturas y las obras están compuestas por dos mitades. De cierta manera todo en la vida tiene distintas perspectivas. Ese es el dialogo que hay en la exposición. Conjuntamente hilvanó imágenes de mi infancia con mis abuelos y todo esto, se ve reflejado en ella. Hay quien ve un pensamiento surrealista y no es que lo tenga en sí.