Por: Sheyla Valladares

Como cada mayo desde 2004 volvió a celebrarse la Feria “Arte para Mamá”, que organiza el Fondo Cubano de Bienes Culturales (FCBC), en el recinto ferial Pabexpo. En su décimo tercera edición esta cita se mantuvo fiel a sus presupuestos fundacionales, ofrecer a la familia cubana diversas opciones para el  embellecimiento de su entorno hogareño, así como para dar respuesta a necesidades de mobiliario, vestimenta, entre otras, a partir de la comercialización de bienes artesanales de alto valor estético.

La feria, que se realizó del 9 al 20 de mayo, convocó además a otras instituciones de la cultura como las empresas EGREM, ARTEX, Génesis, Coral Negro, Quitrín, así como la Distribuidora Nacional del Libro y el Centro Provincial del Libro para complementar su propuesta.

Singularizó la inauguración de “Arte para Mamá” el desfile de moda protagonizado por el proyecto ECOS Vestuario 2017, resultado de la integración entre el FCBC y la Oficina Nacional de Diseño Industrial (ONDi), en el que convergieron  Filigranas Oliva, Cruxero, Zulú, Calzados Correa, Serigrafías Pozo, así como estudiantes y profesionales del ISDi y la ONDi. Ello permitió presentar productos vestimentarios en consonancia con nuestro contexto sociocultural y económico. 

Pabexpo acogió en esta oportunidad 232 stands individuales y 17 institucionales, cuyas producciones pudieron ser mejor atendidas por los visitantes gracias a una distribución espacial más eficaz luego de la selección de los expositores.

Las diferentes salas del recinto ferial posibilitaron organizar la exposición de artículos artesanales por manifestaciones. En este sentido, el calzado, los productos de piel y madera, entre otros, fueron presentados en la sala A; mientras en la B se situaron los textiles, la bisutería y la muñequería, y en la C expusieron las instituciones participantes, junto a los creadores y artesanos que trabajan la cerámica, el vidrio, la orfebrería y la elaboración de muebles.

Arte para Mamá, por su frecuencia anual, permite constatar las diferentes etapas del proceso creativo de los artesanos y artistas de todo el país, a partir del trabajo de las filiales del FCBC con sus creadores. Se puede advertir la consolidación de los distintos proyectos, así como la evolución hacia otras vertientes artísticas o la irrupción de nuevas iniciativas.

La elaboración de mobiliario, entre las distintas manifestaciones que defienden los artesanos del FCBC, es una de las que muestra un desarrollo más sostenido, pues cuenta con nombres ya reconocidos por sus trabajo, donde se combinan de manera orgánica el diseño, el aprovechamiento de recursos y de disímiles materiales que suelen desecharse, la recuperación de elementos de nuestra tradición utilitaria, así como la revisitación de las características del interiorismo cubano.

En este sentido, destacaron este año en Pabexpo los muebles de mimbre de la filial de Las Tunas, por la variedad y calidad de sus ofertas; el mobiliario para terrazas y patios procedente de Villa Clara, la oferta de la Tienda del Mueble capitalina,  la propuesta de Almacenes Mata, donde se distinguen sus baúles, butacas, sofás y mesas de pequeño formato, las opciones novedosas presentadas por el colectivo Los Chapuserios de Pinar del Río, el cual recupera los materiales descartados para darles nueva vida, entre otras proposiciones que validan el desarrollo alcanzado por esta manifestación.

El vestuario presentado mostró tendencias, tejidos y técnicas en consonancia con la realidad de nuestro país, de ahí la aceptación que paulatinamente han ganado entre la población que asiste a Pabexpo. Cada vez son más los seguidores de las confecciones textiles de Analú, Annia, Hilda Rosa, Salomé, Freixas, Triel, Cruxero, Xenia, José Luis González, Jesús Frías, Carmen Ferrán, entre otros, por los diseños atractivos, las técnicas empleadas, la elección de las texturas y los colores, a través de los cuales promueven los valores de la moda cubana para todas las edades.

Además “Arte para Mamá” se ha consolidado como un espacio eficaz para que los creadores de textiles muestren su trabajo, al tiempo que sirve como mecanismo para estimular el gusto estético en cuanto al vestuario que se elige para las distintas actividades de la vida cotidiana.

Entre toda la amalgama de productos artesanales presentada en la feria, la bisutería, el calzado, la cerámica, los muñecos confeccionados con tejidos de estambre, las creaciones de piel, así como la oferta de cactus, helechos y flores del desierto, también encontraron sus adeptos.  

Este evento deberá continuar atendiendo temas como la selección de los proyectos creativos para jerarquizar los de mayor calidad artística, la distribución espacial que favorezca la visualidad general de la feria, así como los artículos expuestos, aspecto en el que también incide la presentación de los stands.

La continuidad del trabajo conjunto con otras instituciones y organismos permitirá presentar iniciativas coherentes y enriquecedoras como ECOS Vestuario 2017, que incidan en la variedad de propuestas de la feria.     

A través de sus trece ediciones este espacio comercial promovido por el FCBC se ha ido fortaleciendo, desde el punto de vista de la diversidad de la producción artesanal y su factura, así como del fomento de la identidad cubana a partir de la recuperación de oficios y técnicas tradicionales. Su validez como vitrina para mostrar el desarrollo de la artesanía cubana en sus más variadas vertientes y su aceptación por parte del público cubano están más que demostradas.