El Museo Nacional de Bellas Artes, la Facultad de Artes y Diseño (FAD) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el artista visual y profesor de esa casa de altos estudios, José Miguel Casanova, con el auspicio de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, desarrollarán en la institución habanera, a partir del próximo mes de mayo, «La Escuela del Fin del Mundo», un proyecto de arte y educación que busca generar experiencias interactivas con el público.
La nueva propuesta, concebida como un proceso continuo dividido en tres etapas, iniciará el viernes 3 de mayo con la apertura de la muestra «Códice del fin del mundo», exposición de dibujos de gran formato realizados por Casanova que será desplegada en la Sala Temporal del 4.o nivel del Edificio de Arte Universal, donde permanecerá abierta hasta el 30 de junio.
La muestra explora la problemática del impacto depredador que ha tenido el capitalismo sobre la naturaleza y la sociedad humana, debido a la concentración de la riqueza y el fomento de la explotación y el consumismo. A partir de una investigación documental acerca de la situación planetaria en la era posindustrial, el artista mexicano aprovecha el precedente cultural de los códices aztecas para integrar en esta propuesta dos ideas: el dibujo como un diagrama y el dibujar como una acción ritual.
Así, en la serie de 10 dibujos de gran formato que ahora presenta, experimenta con materiales significativos: desde el papel amate, soporte original de los códices, hecho a mano del árbol del mismo nombre por los pueblos originarios, hasta el uso de petróleo, fuego, oro y su propia sangre.
En una segunda etapa, en el mes de julio y bajo la coordinación de Casanova, se desarrollarán talleres de arte-educación en la sala, con la participación de comunidades específicas de La Habana y el público del Museo, a través del diálogo y acciones que generen una investigación colaborativa y piezas museográficas, lo cual se integrará en una exposición del proceso.
Propiciarán estas mediaciones los artistas docentes Brenda Anayatzin Ortiz Guadarrama, profesora de Fotografía de la FAD de la UNAM, e Idaid Rodríguez Romero, profesor del Seminario de Soportes Alternativos de la FAD, por la parte mexicana; de Cuba participarán Glenda Salazar, profesora de Fotografía de la Universidad de las Artes, y Juan Carlos Rodríguez Valdés, director del Museo de Arte Pinar del Río y coordinador del proyecto artístico-pedagógico «Farmacia».
En la tercera etapa, durante el mes de agosto, los artistas docentes coincidirán igualmente durante un seminario en Taxco y Ciudad de México, para generar experiencias similares con públicos y especialistas mexicanos. Ese quehacer ha de posibilitar la elaboración de materiales museográficos, los cuales se sumarán a la exposición del Museo en la primera semana de septiembre y hasta el final de todo este desarrollo colaborativo, el 6 de octubre.
José Miguel González Casanova, nacido en Ciudad de México, en 1964, se ha desarrollado como artista multidisciplinario, ensayista, editor, curador, escenógrafo y educador, realizando entretanto numerosos proyectos artísticos, en los que despliega obras colaborativas e investigaciones centradas en la vinculación del arte, la educación y la economía.
González Casanova, quien posee un alto reconocimiento por múltiples proyectos interdisciplinarios, autogestivos y colaborativos, y por su labor como profesor, es egresado de la Escuela Nacional de Artes Plásticas de la UNAM, donde sido profesor de dibujo por 35 años, y través de numerosos talleres ha potenciado el enfoque interdisciplinario, el arte público y la creación de proyectos en contextos específicos.
El actual proyecto en el Museo Nacional de Bellas Artes se inserta dentro de su trayectoria, imbricada en el ámbito artístico-educativo y de trasformación de realidades problemáticas y su visión sobre el arte como mediador y facilitador de la vida humana.
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