Que suba el telón y se inicie el Jazz Plaza 2022

Foto: Ariel Cecilio Lemus/Cubadebate/Archivo

En las calles de La Habana vuelve a sentirse el jazz, como parte intrínseca de una ciudad que vive con y por la música. Como cada enero, la capital se convierte en la plaza ideal para un evento que consta con prestigio consolidado dentro del circuito de festivales que ponderan este género musical.

El Jazz Plaza no decepciona y esa afirmación va más allá de la calidad artística de los instrumentistas, orquestas y agrupaciones, o el exquisito programa de presentaciones, ideado para satisfacer las exigencias del público jazzista.

Jazz Plaza es el evento musical de mayor envergadura en Cuba, no solo por la calidad artística, sino en términos de espacios y cantidad de presentaciones. Surgió como una descarga entre amigos, que por su calibre y originalidad ha perdurado en el tiempo. A ello se suma el empeño de un comité organizador que ha ganado experiencia en estas 37 ediciones, gracias a errores y desatinos y saber cuál es la mejor manera de hacer disfrutar a melómanos y amantes del jazz.

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Gastón Joya Perellada quiere este año tocar con sus amigos. “Llevaba mucho tiempo fuera y tenía añoranza de estar en casa, de compartir con mis hermanos, en el ambiente donde me formé. Por esa razón hice solo una presentación que saldrá en la televisión esta semana”.

Una vez más lo convocaron a tocar su música—con probada calidad— y lo hizo con su trío y una invitada especial. “También estaré tocando en el lanzamiento del álbum de mi hermano de siempre, Oliver Valdés. Es su primer disco como solista y lo hemos grabado con muchísimo cariño. Tocaremos además con Carlos Sarduy. Juntos trabajamos en el comité, nuestra banda y nos hace ilusión que el público de La Habana, sobre todo más joven, se conecte con Carlitos. Es un músico especial y habla de su Habana en cada nota que sale de su alma, así como nosotros. Somos de la misma tribu. Extrañaba mucho mi sitio, mi lugar, mi gente. Aprovecho al máximo y sé que al público le gustará lo que tenemos preparado”.

Sobre esta edición del Jazz Plaza, el contrabajista cree que pese a que son “tiempos diferentes y que hay situaciones repentinas en todos los contextos”, la manera de trabajar el festival este año ha sido superinteligente.

“Es bueno tener los eventos en vivo y poder hacer conciertos para las plataformas virtuales. Es una manera de expandirse, que el público agradece. No se trata solo del gusto hacia un artista; está el enfoque de cómo vendemos un movimiento y un escenario que atrae a las personas de muchos lugares. La cuestión está en cómo reunirlas y ganar más audiencia, algo que en estos tiempos es un objetivo necesario”.

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La presente edición, del 18 al 23 de enero de 2022, partirá de prácticas implementadas en el 2021, a causa de la covid-19, donde los escenarios y paneles teóricos pasaron a las plataformas virtuales. Esta vez se alternarán conciertos y espacios de debate de forma presencial y otras mediante citas virtuales.

Precisamente, en conferencia de prensa, Indira Fajardo, presidenta del Instituto Cubano de la Música aseguró: “enero siempre nos recibe con esta gran fiesta de música cubana, la cual supone una nueva oportunidad para que nuestras instituciones culturales sirvan de plataforma y visibilicen lo mejor que tenemos en nuestra música cubana, sus artistas y vínculos con creadores foráneos”.

Otra de las virtudes que engrandece esta fiesta del jazz es que aúna en una misma semana a la mayor cantidad de géneros musicales posible incluida la música popular cubana y extranjera, con espacios concebidos para mostrar el talento de los instrumentistas, en “descargas” en solitario o como invitados de artistas de renombre en conciertos.

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Michel Herrera considera que dentro de las expectativas con este Jazz Plaza está integrar nuevas tendencias musicales a la cultura de Cuba. “Es un espacio para compartir y para que tanto los artistas internacionales como los nacionales, después de dos años de pandemia, puedan mostrar por donde va su trabajo musical. Poder, por supuesto, conectar con el público, que tal vez por este tiempo se ha alejado un poco”.

Para el saxofonista en este evento confluyen músicos y tendencias musicales; un espacio necesario para la cultura cubana y, aunque se hace en condiciones diferentes, es una cita que no se debe perder, para la renovación de las tendencias musicales en Cuba.

Cree también que el Comité Organizador del Jazz Plaza ha tenido que reinventarse y adecuarse a las posibilidades de las nuevas tecnologías, en las que se incluyen conciertos en streeming. Asimismo, la utilización de los espacios en la televisión cubana, aunque, este año también habrá conciertos presenciales.

“Es un paso de avance. Justamente, gracias a esas experiencias anteriores el festival ha crecido en difusión y alcance. Un espacio vital para la fuerza del jazz cubano”.

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La imagen de este Jazz Plaza corrió a cargo del premio nacional de Artes Plásticas 2017, Eduardo Roca Salazar (Choco), con su obra “Trompeta china”. Es una pieza en la que el maestro de la plástica empleó la técnica de serigrafía y homenajea a las congas en los carnavales santiagueros, así como las tradiciones musicales de esa zona oriental, que tanto han nutrido al jazz cubano.

Además de las plataformas de Streaming Cuba en internet y las del Ministerio de Cultura y el Centro Nacional de la Música Popular, y su incalculable alcance, el Festival concentrará las presentaciones en tres sedes capitalinas: el Teatro Nacional de Cuba, el América y la sala Tito Junco del Centro Bertolt Brecht.

Como plus y colofón del evento, se hará el simposio teórico Leonardo Acosta In Memorian, un encuentro propicio para el debate sobre el jazz, y las nuevas tendencias dentro de este género musical que se emplean en Cuba y el mundo. En su amplio programa, el simposio abarcará la influencia de figuras de la escena sonora cubana, la historia de ese género y los retos de la industria. Además, el segmento Primera Línea reunirá a melómanos y profesionales de la industria musical en encuentros especializados.

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Foto: Irene Pérez/ Cubadebate/Archivo

El pianista Rodrigo García Ameneiros forma parte del plantel que se presentará en el Festival Jazz Plaza 2022. “Todos los músicos que participaremos en el festival estamos supercontentos de que se haya podido dar y ansiosos por que empiece”. Y, aunque el pasado año no se realizó el evento de manera presencial, para los músicos que se preparan año tras año creando proyectos y tocando nuevos repertorios, fue un hueco tremendo, ya que estábamos acostumbrados a tener un festival de esta envergadura cada año. Es un logro tremendo mantenerlo, le trae mucha ganancia cultural al país”.

“Por primera vez, se fusionarán las maneras presencial y online. Esta es una buena manera de reinventarse porque los teatros no van a estar al 100 % de capacidad, existirán restricciones. Se han hecho grabaciones que quedarán para la televisión para que lleguen a todas las personas algunos sabores del festival”.

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Entre las novedades de la 37 edición y gracias al programa Transcultura de la Unesco, se hizo extensiva la convocatoria para que músicos de la región del Caribe confluyan en el evento y dialoguen con el público y los músicos cubanos.

Entre los artistas invitados estarán presentes el pianista Jacob Karl Anders, de Suecia; Ray Lema y Laurent de Wilde, de Francia; Javier Malosetti y el proyecto la Colonia, de Argentina; Sebastián Carmelo, de España; Mike del Ferro, de Holanda; Pekka Pylkkanen, de Finlandia; Radovan Tariska, de Eslovaquia; y Marieke Louix, de Bélgica, entre otros. De Estados Unidos llegarán los músicos Dominic Miller y su cuarteto, el saxofonista Donald Harrinson, Haley Grey, The Common Tatters, Dean Torrey, Juan Chiavassa, Christian Moraga y Jazzmenia Horns.

De Cuba se presentará Bobby Carcasés, junto a talentosos músicos como Nachito Herrera y Habana Jazz, Roberto Carcasés, Orlando Valle, Roberto Fonseca, Ernán López Nussa, y Germán Velazco.

¿Qué no te debes perder en el Festival Jazz Plaza 2022?

La imagen de este Jazz Plaza corrió a cargo del premio nacional de Artes Plásticas 2017, Eduardo Roca Salazar (Choco), con su obra “Trompeta china”. Foto: Karla Castillo Moret / ACN/Archivo

Desde Cubadebate te recomendamos el concierto inaugural este martes a la 9 de la noche en la Sala Avellaneda del Teatro Nacional, a cargo del pianista cubano Nachito Herrera, unido al talento instrumental de los músicos norteamericanos que integran la banda Habana Jazz.

Participarán en la presentación Jorge Reyes, Juan Carlos Rojas (El Peje), Edgar Martínez, Luis Mariano Valiente, Orlando Vázquez, Reinaldo Melian, Harold Madrigal, Javier Zalba, Alfred Thompson y Yoandy Argudín. Los invitados especiales serán Dagoberto González, Tomás Ramos Ortiz (El Panga) y Juan Carlos Villegas.

Después, en ese mismo lugar será el espectáculo “Del Blues a la Timba-de la Timba al Jazz” con Bobby Carcassés y la Big Band Afrojazz e invitados César López, Maraca, Roberto Carcassés, Jamil Shery, Edgar Martínez, Octavio Kotan, Tanmy López, Miguel Ángel García (Wiwi), Belinda Guerra, Laura Valdivia y el bailarín Reinaldo Baró.

En el programa de conciertos sobresalen citas inexcusables como la presentación del músico angoleño Ray Lema y el francés Laurent de Wilde, el miércoles 19, también en la Sala Avellaneda.

Igualmente, se esperan los espectáculos de los pianistas Jacob Karl Anders (Suecia) y Mike del Ferro (Países Bajos) junto al saxofonista Pekka Pylkkanen (Finlandia), así como la delegación de músicos de Argentina, representados por el bajista Javier Malosetti, y el proyecto La Colonia, el jueves 20 en la misma sede.

Destaca la presentación de Roberto Fonseca con José Luis Cortés, Maraca y Haydee Milanés como invitados (Sala Avellaneda, sábado 22); Emilio Vega y Paso al Frente (martes 18 Teatro Bertolt Brech); Dayramir González y Habana enTRANCé con Dean Torrey, Juan Chiavassa, Cristian Moraga y Jazzmeia Horns (jueves 20 Teatro Bertolt Brech) y la presentación del disco Nasobuco de Oliver Valdés el jueves 20 de enero en la Sala Covarrubias del Teatro Nacional.

Estas son algunas sugerencias, pero sí de recomendaciones se trata, aproveche el tiempo, llénese de música y cuando termine la fiesta ya hablaremos de los resultados. Que la premisa sea sentir el jazz.