El documental Donde vas tú…, ópera prima del realizador cubano Pao Fraga, obtuvo recientemente el Premio al mejor documental en lengua extranjera en el London International Film Maker Festival of World Cinema.

Este audiovisual, que entre sus productores cuenta con el propio autor y la Empresa de Grabaciones y Ediciones Musicales (EGREM), fue estrenado el 26 de junio del pasado año en La Habana y aborda el Punto Cubano, declarado en el año 2018 Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.

Pero de este documental y de su premio, poco se ha hablado, por eso hemos querido conversar con su director, Pao Fraga.

Pao, yo me enteré de su premio por Facebook y luego Élsida González, de la EGREM lo comunicó al Blog Cubarte, entonces busqué en Internet pero no encontré nada…

Mira, no sé decirte con exactitud pero podría ser porque en muchas ocasiones cuando presento el documental o se habla de un documental de Pao Fraga, la gente dice: « ¿Y ese quién es?», creo que esa es la esencia de lo que sucede. (Risas)

Yo me gradué en la Facultad de Arte de los Medios de Comunicación Audiovisual (FAMCA), de lo que es hoy la Universidad de las Artes de Cuba (ISA), en el 2008, de sonido, y desde ese entonces empecé a trabajar en el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC).

Recuerdo que José Galiño, que era el jefe del Departamento de Sonido en aquel entonces, me mandó para el estudio de Prado y Trocadero provisionalmente, y cuando yo supe que ese lugar había visto nacer al Grupo de Experimentaciónn Sonora lo de provisionalmente se fue desvaneciendo… La cosa es que desde allí, y a partir de ese momento, tuve la posibilidad de participar en una gran cantidad de películas y sin embargo me ha sucedido que algunos con los que trabajé sentado lado a lado, por largas semanas incluso, no me recuerdan. (Risas).

Pero bueno eso para mí es más bien un incentivo.

Háblenos un poco de este festival…

Este es un festival… no es el único que hay en Londres, ni el más grande; pero cualquier evento de este tipo en una ciudad de tanta importancia cultural como Londres tiene una relevancia extra, además este festival tiene un ambiente particularmente familiar, donde todo está pensado y organizado de modo que el último día, el día de las premiaciones, uno tiene esa sensación… como si conociera a cada uno de los participantes y desde hace mucho tiempo. Nacen buenas amistades ahí.

Por otro lado tiene la peculiaridad de que forma parte de una serie de festivales que se celebran en varias ciudades europeas como Niza, que está oportunamente al lado de Cannes, en Milán, Madrid, Amberes; todo esto aumenta la cobertura promocional de tu película si es seleccionada, porque los festivales son, además, una suerte de vitrinas para mostrar las obras y eso es algo que también se va buscando por parte de los creadores y si además llega, como en el caso de Donde vas tú…, el premio… bueno, ya es un plus.

¿Estaba nominado solo en el apartado Mejor Documental de Lengua Extranjera?

No, teníamos tres nominaciones más: Mejor diseño de Banda Sonora, esta nominación me honró mucho, porque estuvo a mi cargo, y realmente este reconocimiento en Londres que es una potencia en el tema sonido… es algo grande para mí.

También en la categoría Arte y Educación, que igualmente me gustó mucho porque está en línea con algunos de los objetivos fundamentales que nos trazamos con la realización del documental, y la otra nominación era Mejor Director de un Documental de Lengua Extranjera.

Todas las nominaciones fueron premios para mí… y el que ganamos, imagínate, tremendo Premio; pero entre lo más significativo, creo, está haber podido llevar el Punto Cubano a Londres, visibilizar este género en el contexto de ese festival, que la gente allí supiera qué es el Punto Cubano, que por cierto les resultó muy interesante.

¿Cómo se logró la comunicación con el público?

Aunque me resultó un tanto difícil explicar algunos temas, como la décima, a un público tan variado culturalmente, creo que la misma organización del festival propició que la comunicación con el público fuera muy buena. Allí, a casi todos los que estaban, tanto cineastas como público en general, les interesaban las diferentes propuestas que se presentaban y ese interés, creo yo, ayuda mucho a la comunicación porque te hace superar la timidez que pudiera atraparte en momentos como esos.

Por otra parte haber conocido a realizadores del mundo entero, de lugares que yo ni siquiera sabía que existían, idiomas que jamás había escuchado… y que todos estábamos allí por lo mismo y en igualdad de condiciones —por lo menos fue así como yo lo sentí― fue realmente muy importante para mí, incluso desde un punto vista filosófico…

Pero que haya obtenido premio también es importante ¿no?

Claro, sobre todo porque en el arte no sucede como en el deporte, por ejemplo, que sabes que el mejor es el que llega primero a la meta, pero decidir qué película es mejor, Joker o Parásitos… es la que más te guste a ti, porque las dos son buenas… es muy subjetivo.

En el arte también ocurre que ser legitimado es importante, como en el cuento de Hans Christian Andersen, “El traje nuevo del Emperador”; cuando el emperador acepta que el traje es maravilloso todo el mundo lo repite y nadie se atreve a contradecir.

Pero, si te soy enteramente sincero, para mí el premio más grande de todos fue percibir el orgullo que estaba sintiendo mi familia por mí, desde este lado del mundo.

El documental compitió en la selección oficial del pasado Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano…

Sí, y fue algo que agradecí profundamente aunque, en mi opinión, podría mejorarse la promoción en cuanto a estos otros documentales.

Donde vas tú… concursó con el cartel del talentosísimo diseñador Claudio Sotolongo y participó en la sección Cultura del apartado Latinoamérica en Perspectiva.

¿Cómo llega usted al Punto Cubano?

Bueno, yo estudié sonido pero soy músico de alma y corazón, también estudié guitarra en la Escuela Vocacional de Arte; cuando entré al ISA fundé un grupo donde todos eran buenos músicos… menos yo (Risas); me atrevo a decir que este grupo fue otra escuela para todos nosotros que poco a poco nos fuimos haciendo grandes amigos, porque estuvimos experimentando constantemente los cinco años. Experimentamos con varios géneros musicales y entre ellos, el Punto Cubano.

Hacía tiempo que yo venía escribiendo décimas, las descubrí con Nicolás Guillén y me interesé, y sin darme cuenta empecé a adentrarme en ese mundo, y cuando decidí hacer el documental ya estaba enamorado perdido del Punto Cubano, ya lo sentía mío, a pesar de la escasa información que hay al respecto.

¿Piensa que esta falta de información determina el desconocimiento que sobre el género hay en el país?

 En gran medida sí. Y quien dice en el país dice en el mundo. Siempre pongo el mismo ejemplo: Podemos llamar a cualquiera que pase y preguntarle si considera que el Punto es importante en tanto elemento insoslayable de la identidad nacional, y te va a contestar que sí; pero cuando le pidas que cite un título de Punto Cubano… ya, o te dirán que no saben o te mencionarán «Yo soy el Punto Cubano» de Celina González que, a pesar de ser uno de los temas más emblemáticos de la música campesina cubana y estar cantado en décimas, no es Punto Cubano.

Una de las cosas que me impulsó a realizar el documental fue precisamente esa falta de información. Cuando empecé a investigar, ya conscientemente para el documental, pude notar que en las instituciones donde se supone que uno acuda en primer lugar para profundizar sobre este tema, no tenían muy claro lo que es el Punto Guajiro. No todos saben que existe el Centro de Investigación y Desarrollo de la Música Cubana (CIDMUC), ni el Centro Iberoamericano de la Décima y el Verso Improvisado (CIDVI)…, yo por ejemplo, no lo sabía.

Fue el realizador y amigo Pablo Massip quien me habló del CIDMUC, y allí conocí a Laura Vilar que me presentó a Amaya Carricaburu, y esta me habló del CIDVI, donde conocí a Luis Paz Esquivel (Papillo) porque el gran laudista Erdwin Vishot me lo presentó, y Papillo terminó siendo el imprescindible asesor de Donde vas tú…, sin él no hubiera sido el audiovisual que es, él es tan responsable del resultado como yo.

¿Por qué este título?

Precisamente por la necesidad de ir a buscar la información a los lugares donde se cultiva el Punto Cubano. Donde vas tú… porque fui buscando el rastro, las migajitas de pan de Hänsel y Gretel.

Papillo en el mismo documental me dice: «no te queda otra cosa que hacer, que recorrer Cuba», y más o menos eso fue lo que hicimos.

¿Cuáles elementos descubrió que conspiran contra el verdadero conocimiento del Punto Cubano?

En primer lugar todos los clichés que tiene…

¿Empezando por Palmas y Cañas?

Sí, aunque es un programa que tiene grandes méritos, tengo que reconocer que cae mucho en los clichés que existen incluso dentro de los cultores del género…

¿De los jóvenes cultores?

No, de cualquier edad, he podido constatar, que cuando hablan de la música del Punto Guajiro dicen: «la música acompañante», como si la música no fuera protagonista.

Cuando preguntas qué no le puede faltar al Punto Cubano, la mayoría de las veces te responden que la décima; pero el Punto Cubano puede ser instrumental y, sin embargo, si declamas una décima no es, necesariamente, Punto Cubano. Además, la décima no es un patrimonio sólo cubano, donde quiera que se habla español o portugués se cultiva la décima.

Entonces ¿lo que hace cubano al Punto Cubano es la música?

Efectivamente, y lo que lo hace Punto también; sin embargo la música está, como se dice, tirada al abandono, y si no fíjate que cuando piensas en intérpretes del Punto Cubano actual te vienen a la mente nombres como Tomasita Quiala, Leandro Camargo, Héctor Gutiérrez, Alexis Díaz Pimienta, Papillo… y una lista larga, todos grandes poetas improvisadores; pero muy pocos tienen en cuenta a nombres como Alberto Arteaga, Erdwin Vishot, Yeinier Delgado, Jorge Félix López, Barbarito Torres… y otra lista larga de virtuosos laudistas, improvisadores también, y músicos en general.

No es menos cierto que la habilidad de la improvisación en décimas es el atractivo más grande que tiene el Punto, y que los improvisadores cubanos destacan en el mundo porque además, son grandes poetas, pero técnicamente, al Punto Cubano lo hace cubano su música.

¿Por qué cree que no llega más al público?

En mi criterio, es por varias razones y una de ellas es precisamente que la música se ha anquilosado, o se ha anquilosado más bien el ángulo de ver la música a la hora de la creación, aquí entran de nuevo a jugar los clichés. 

¿Quiénes son testimoniantes en Donde vas tú…?

Los testimonios vienen desde los más fieles seguidores del Punto entre los campesinos, hasta los representantes más destacados y conocidos del género tanto en el campo como en la ciudad; desde poetas e investigadores aficionados hasta los especialistas más reconocidos en el tema. La lista es tan larga e importante que yo no me atrevería a mencionarte ningún nombre… Dejémoslo de sorpresa para el documental.

¿Es cierto que al Punto Cubano la musicología lo entiende como una práctica cultural y la mayoría de los cultores como un género musical?

Esta es una de las contradicciones que se muestra en el documental de las que te hablaba y que puede ser una de las causas del gran desconocimiento que hay acerca del Punto Cubano. Los conceptos diferentes, refiriéndose a lo mismo, crean confusiones que, al final, alimentan ese desconocimiento.

¿Considera que la declaración del Punto Cubano en el año 2018 como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, ayude a un mayor conocimiento popular del género?

Pienso que el reconocimiento ayuda a la promoción del Punto Cubano, sin embargo no es sólo promoción lo que necesita el Punto. Queda mucho por hacer todavía. En el documental, también trato de reflejar esas cosas.

¿Qué planes tiene para la exhibición del documental?

Yo me siento en el compromiso de llevar el documental a todos los lugares por donde fuimos buscando información y trataré de hacer el mismo recorrido que hice filmando; pero esta vez para mostrarlo a sus protagonistas, porque para ellos se hizo. Y todas las polémicas y debates que pueda generar este documental, siempre serán interpretadas por mí como un premio.

¿Cómo se ve usted, como un investigador que hace documentales o como un documentalista que investiga?

Yo me veo… como un creador que trata de ser sincero consigo mismo. Sólo eso.

¿Próximos proyectos?

Bueno, ya estamos prácticamente empezando las grabaciones para el próximo documental. Que es un proyecto muy ambicioso y se las trae, pero sólo el placer que me da ahora mismo pensar en él, hace que todo valga la pena.

Cuando nos volvamos a ver te cuento más detalles.

Al cierre de esta edición, se conoció que Donde vas tú…, está nominado en cuatro apartados del Festival de Niza, en Francia, a celebrarse en el venidero mes de abril: Mejor Director de un Documental en lengua extranjera; Mejor documental de lengua extranjera; Mejor fotografía de un documental, y Premio a la Educación Artística.

¡Más felicidades para Pao Fraga y para el Punto Cubano!