Inscrito dentro del llamado “cine independiente”, el largometraje de ficción “La mujer salvaje” (2023), opera prima de Alán González es, a no dudarlo, la película cubana más exitosa en los últimos tiempos.

Así ha venido constatándose desde su estreno en el Festival de Cine de Toronto (TIFF) con la obtención de tres premios en el de Ceará, Brasil; resultar el más premiado en el 44 Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano; ganar el de mejor actuación femenina para Lola Amores en el de Málaga, España, y, recientemente, hacer suyo el Gran Premio en la segunda edición del Kinoplatino, en Bruselas.

Por si fuera poco, el filme recibió el espaldarazo de la Asociación Cubana de la Prensa Cinematográfica que lo consideró el mejor largometraje nacional de ficción de 2023 exhibido en nuestro país.

Finalmente, el público de la Mayor de las Antillas está teniendo por estos días la posibilidad de disfrutar de un drama que ha acaparado tantos titulares, pues luego de su premier en el Yara este miércoles, se programó en esta sala y en la del Acapulco de jueves a domingo, para pasar posteriormente a ser presentado en el resto de las provincias.

En realidad, la cinta podrá crear cierto desconcierto en algunos espectadores, en tanto su puesta en escena no se corresponde con los cánones a que nos tiene acostumbrados la cinematografía nacional en cuanto a los largos planos, los extensos silencios, la absoluta ausencia del mar aun cuando se desarrolla en la urbe capitalina, así como la inexistencia de cualquier enjuiciamiento acerca de los personajes y situaciones que se nos muestran.

En lo que es considerada una película de personaje, el espectador acompaña a Yolanda, mujer de 40 años de edad que acaba de ser parte de un crimen pasional y recorre La Habana profunda buscando a su hijo, casi adolescente, para escapar con él de un entorno que la condena como mujer y como madre.

Una inmensa Lola Amores tuvo a su cargo el rol protagónico, desempeño por el que ha obtenido sendos lauros en los Festivales de Málaga y Ceará. En el del niño, un muy prometedor Jean Marcos Fraga Piedra hace su debut.

Humanizar al personaje que desde el título se nos presenta “salvaje”, fue uno de los mayores retos para la actriz que, como el resto del equipo, ya tenía ante sí el de asumir este trabajo en medio de la pandemia de Covid-19.

“Me siento especialmente identificado con aquellas personas que, por alguna razón, en general todos nos ponemos de acuerdo para rechazar, cuestionar, incluso castigar. Vivimos en una sociedad que, desgraciadamente, abunda en cuestionamientos en lugar de entender al otro (…) Nos interesaba contar la historia de una madre en su imperfección porque no hay una madre perfecta”, explicaba en un reciente encuentro con la prensa Alán González, además coguionista de este drama junto a Nuri Duarte.

Como también ha contado el cineasta, fue propósito suyo subvertir la manera de narrar, no partir de la empatía del espectador con la protagonista para luego contar la historia, sino ir construyendo esa identificación a lo largo de la película. Según él, el principal desafío que ha tenido que enfrentar es el de lograr que el que acuda a verla sobrepase el primer tercio de los poco más de 90 minutos que dura la misma.

Con una fotografía centrada en la protagonista, es el sonido el que fundamentalmente sugiere el contexto en el que se mueve Yolanda, el cual es revelador de otras aristas de la sociedad cubana actual.

Completan el elenco del filme Isora Morales, Grisell Monzón, Yaité Ruiz, Leandro Sen, Arnaldo Galbán, Yailín Coppola, Leidys Chiv, Andros Perugorría y, en una actuación especial, Jorge Perugorría.

Con Claudia Calviño en la producción, el largometraje corrió a cargo de Cacha Films, con la colaboración de Sonata Films, Wajiros Films y el Fondo de Fomento del Cine Cubano (FFCC). Lorenzo Casadio, estuvo en la dirección de fotografía; Alexis Álvarez Armas, en la de arte y Joanna Montero, en la edición.

“La mujer salvaje” es una película que invita a la reflexión, a repensar la forma en que miramos al otro, a ponernos en su piel. Aparentando ser sobre la violencia es, como se ha dicho, una película sobre el amor.