Confiada en el poder de convocatoria que ha venido acrecentando por más de medio siglo, la Feria Internacional de Artesanía, FIART, regresa una vez más a Pabexpo en los inicios de un diciembre que tradicionalmente comparte sin temor con un no menos movilizador Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano y, en la presente ocasión, también con la XV Bienal de La Habana.

Para ello, en esta XXVI edición que habrá de desarrollarse del 6 al 22 del mes en curso, cuenta nuevamente con una amplia variedad de productos elaborados por artesanos cubanos y de otras nacionalidades, entre los que predominan los que llegarán desde Colombia, India, México, Perú y Venezuela.

Más, como en la renovación reside una de las claves del éxito de empeños que, sobre todo como este, se mantienen a través del tiempo, es propósito de los directivos del Fondo Cubano de Bienes Culturales, FCBC, ampliar el espectro de propuestas del evento más allá de lo puramente comercial, brindándole mayor presencia a otros elementos de carácter cultural.

Cumplimentar a cabalidad el lema “Arte, Utilidad y Oficio” que acompaña a la Feria, haciendo énfasis en su tercer componente, ha sido la brújula en dicho objetivo, el cual aspiran a materializar a través de una serie de talleres prácticos que harán asequible a los visitantes interesados una serie de técnicas, como las empleadas en la muñequería y el papier maché, por ejemplo.

Para ello contarán con prestigiosos miembros de la Asociación Cubana de Artesanos Artistas, ACAA, organización que tendrá una participación superior en FIART, otra de las novedades de la actual edición.

Así estarán presentes los representantes de la colonial Trinidad con su vasta tradición en las artes manuales, los del villaclareño proyecto Telarte y, por segunda vez compartiendo su sapiencia con colegas y públicos, los maestros artesanos de Venezuela.

Homenajes, como la entrega del reconocimiento por la Obra de la Vida o el que se le tributará al mexicano Fondo de Fomento de las Artesanías, FONART, en su aniversario 50; desfiles de modas y ventas de productos utilitarios con un nivel de producción no artesanal, suman a los atractivos de una cita que estará atenta a posibles inquietudes, a través de una oficina de atención a la población en la propia sede de Pabexpo.

De tal modo regresa la Feria Internacional de Artesanía, renovada en sus propuestas, apostando por la preservación de los oficios y por mantener esa capacidad de convocatoria que ha sabido conservar en cada diciembre que comparte.