Una nueva mirada desde el audiovisual al clásico cubano Manteca, verá la luz desde el 15 de septiembre en todas las plataformas digitales, la radio y la televisión de la Isla.

Bajo la dirección de Amén Perugorría, regresa a la escena contemporánea el reconocido músico cubano Chano Pozo, desde una versión que bajo el título Manteca 2.0 se corresponde al más reciente sencillo de Andrés Lewin, acompañado de músicos de la talla de Los Van Van, Alain Pérez, coproductor del tema, Pedrito Martínez, Yissy García, Gonzalo Rubalcaba, Rashawn Ross y Ron Balake.

El tema es un homenaje a la grabación y lanzamiento original de Manteca de Chano Pozo y Dizzy Gillespie en el año 1947: dos virtuosos, uno percusionista; el otro trompetista que, reunidos en la ciudad de Nueva York, produjeron este disco que ha pasado a la historia como referente obligado del jazz, al significar la introducción de la percusión afrocubana en el género norteamericano.

A más de seis décadas del trascendental acontecimiento, Andrés Lewin, líder del proyecto Tribe Caribe Cayo Hueso, invita a músicos cubanos que nacieron y crecieron en esta localidad a hurgar en sus raíces y llevarlas con su talento a esta nueva propuesta audiovisual que, como versión inédita, parte de sus elementos originales para revisitarlos y rediseñarlos para conformar una fabulación dramática, donde se acude a hechos reales como la muerte de Chano Pozo y su repercusión.

Con esta propuesta Tribe Caribe al decir de su creador “vive la aventura de unificar voces del Caribe”, al tiempo que enaltece la voz del histórico barrio centrohabanero de Cayo Hueso. Espacio natural de la rumba y sus hacedores en todos los tiempos y a la vez cuna de valiosos exponentes de la música cubana como Félix Chappottín, el cuarteto Los Zafiros, Juan Formell, Carlos del Puerto, integrante de la agrupación Irakere u Omara Portuondo.

Como dato curioso se supo que el tema fue compuesto desde el lugar de nacimiento de alguno de los músicos más importantes de Cuba que crecieron apenas algunas cuadras de donde se filmó el video.

Toda una celebración de barrio que trasciende a la cultura toda. Como un aplauso unánime a la rumba, a la unión musical entre La Habana y Nueva York, esta nueva propuesta audiovisual habla de raíces profundas, de identidad nacida desde la música.