Hoy son seis muchachas para las cuales se cerraron las barreras de lo imposible. D´Eva, una agrupación que nació en 2013, definiéndose como herederas y defensoras de lo más raigal de la música cubana; pero por si fuera poco han logrado un repertorio que, con acierto y sumo respeto, trasciende las fronteras de lo puramente tradicional y mezclan sonoridades foráneas contemporáneas, conservando la esencia de casa.

Música para bailar y escuchar, solos que remedan la tradición en instrumentos como la flauta y el tres, este último en manos de su directora Yaneris Carbonell, una chica de la cual el Maestro Efraín Amador aplaudió su forma de expresarse, son algunos elementos que destacan dentro de su quehacer; pero hay mucho más en torno a los arreglos y referencias intertextuales que la agrupación hace suya en pos de la selección de un buen repertorio.

El más reciente concierto en grande de la agrupación se produjo como cierre del verano en el Pabellón Cuba y demostró la cohesión interpretativa de estas artistas que han logrado en poco tiempo más que un buen sonido de mujer. Justamente con su directora compartimos estas líneas.

Yaneris Carbonell

¿Por qué nace D´Eva?

“Como ya sabes D´.Eva se crea en 2013. Fue una decisión que tomamos dos integrantes que felizmente se mantienen en la orquesta: Sady Montano y Raquel García, y yo. Veníamos trabajando juntas en una agrupación mixta, y el hecho de formar D´.Eva, se debe, esencialmente, al reconocimiento popular que sabemos tienen las agrupaciones femeninas; nosotras teníamos una serie de intereses comunes respecto a cómo enfocar la música tradicional cubana, y a partir de ello intentamos preparar algo  diferente. Esa ha sido la esencia de nuestro trabajo desde los inicios hasta hoy”.

Son una agrupación femenina dentro de la música popular en un mundo regido por hombres. ¿Cómo lograr una propuesta distintiva?

“En lo particular provengo de trabajar en agrupaciones de tríos, intervine en varios festivales dentro de esa modalidad, lo que marcó mi interés por el trabajo de voces, me interesa mucho y fue justamente ese el sello que traté de imprimirle a la agrupación. Nos identifica, aun cuando interpretamos lo tradicional cubano, incluso, al asumir repertorio internacional, siempre marcamos el énfasis en lo vocal.

Realmente la música tradicional cubana usa dos voces, cuando más una tercera, haciendo coros, pero nosotras insertamos cuatro y hasta cinco en los temas que defendemos.

Por supuesto no tanto como un grupo típicamente vocal, pero sí insertamos esta característica que, en sentido general nos place, nos obliga a estudiar muchísimo y mantener de manera más estrecha la cohesión y empaste para cada interpretación.

Realmente es un trabajo que requiere de mucho ensayo, significa todos los días desafiar un reto, pero confiamos en que asumirlo le propicia muchas más luces al trabajo de la agrupación.

¿Cuál es el criterio de selección del repertorio y cómo combinan tradición y modernidad?

“Partimos de asumir un repertorio variado, de ahí la selección. Es un trabajo colectivo, en el cual todas aportamos ideas, y a partir de ahí vamos desarrollándolas. Nuestro primer y fundamental criterio es poder combinar tradición y modernidad, siempre nutriéndonos de información musical y teórica, de esa manera ir encontrando referentes de músicos de todos los tiempos—tanto cubanos como foráneos—; saberes y haceres mancomunados en función de reglar un trabajo respetuoso, tanto a nivel de letras como de aportes musicales.

Puede que usemos, incluso, recursos de agrupaciones actuales para repensar un repertorio tradicional; pero sobre la base de estudiar y aprehender de los que han sido los padres y gestores fundamentales de la música hasta hoy.

Tenemos un formato tradicional, bongó, tres, guitarra acústica y de ahí el trabajo se extiende a diferentes géneros, nos volcamos en las adaptaciones, por ejemplo, hemos incursionado hasta en la kizomba, porque los géneros están ahí, solo hay que “explotarlos” de manera coherente. Por supuesto no tiene la sonoridad que exigirían los instrumentos originales, pero el respeto a su esencia la mantenemos. Y hasta el momento hemos sido muy bien recibidas por el público”.

¿Han pensado en su primera producción discográfica?

“Mas que soñarlo, estamos intentando llevar a cabo este proyecto desde hace mucho tiempo, de hecho tenemos seleccionado repertorio para producir más de uno, con diferentes estilos, con muchas ideas, pero se nos ha hecho muy difícil acceder a una discográfica, y por tanto contar con un fonograma licenciado, pero no dejamos de apostar por ello”.

Experiencias que hasta hoy le hayan marcado especialmente

“Han sido muchísimas porque trabajar en los hoteles que es lo que más ha hecho

D´ Eva nos ha dotado de tantas y tantas vivencias extraordinarias. Se trata de un público muy variado tanto cubano como extranjero, está quien solo va a disfrutar mientras escucha, se ríe, baila y hay quien es conocedor de lo que está escuchando y por tanto es capaz de solicitar repertorio. Estos matices nos han permitido crecer constantemente. Otras experiencias que no podemos dejar de mencionar es el habernos podido presentar en eventos como los que se desarrollan en el Pabellón Cuba. Igualmente, tuvimos la oportunidad de ser invitadas en más de una ocasión en el espacio que auspiciaba la maestra Argelia Fragoso de hecho, hicimos una versión del tema “Me haces bien” de Jorge Drexler que ella popularizó y en nuestro modo de hacer sigue causando muy buena aceptación; de hecho la versión fue gratamente acogida por ella”. 

La primera aspiración ahora mismo D´ Eva

“Parece sencillo decirlo, pero pensarlo y visualizarlo es tremendo. Aspiramos a que nuestro trabajo sea reconocido, valorado, que las personas lo disfruten mucho porque en él va mucha de nuestra dedicación como profesionales, y el público es la razón de ser de todo artista.

Aspiramos a formar parte del catálogo de alguna agencia discográfica para que nuestro sueño de disco no se escuche solo en nuestras almas, sino cobre vida en los hogares y calles de nuestro país”

Por el momento todos los viernes nos presentamos en el Hotel Parque Central desde hace un poco más de cuatro años, el sitio que se ha convertido en nuestra “casa encantada” para seguir creando y soñando”.