Para despedir el curso 2023-2024 de los Talleres Comunitarios que se imparten en el Conjunto Folklórico Nacional de Cuba (CFNC), las maestras Míriam Izquierdo y Keyla Galarraga organizaron una Clase Abierta en el Salón principal de la sexagenaria institución.

Hasta allí llegaron los aprendices (niños, adolescentes y jóvenes) y sus familiares, todos motivados por el respeto y el interés hacia las danzas y la música popular cubana, en especial la de matriz africana. 

Toques, cantos y danzas fueron interpretados por quienes adquieren conocimientos en la casona de la calle 4 entre Calzada y 5ta. 

Ana Irma Echenique es de las de mayor permanencia en esta acción comunitaria, ahora excede los 24 años, pero desde hace siete asiste, semana tras semana, a aprender de las danzas de origen yorubá, bantú, Arará o de las autóctonas (ciclo de la Rumba, Son, Danzón u otra). 

"...actualmente soy estudiante de Danza Folklórica de la Universidad de las Artes (ISA) y lo que aquí he aprendido ha sido vital para mi entrada a la Universidad y para cada clase que allí recibo. 

Pertenecer a la "cantera" de esta prestigiosa compañía, es un honor inmenso para mí. porque siento el compromiso de dar continuidad al legado de los grandes maestros fundadores (Rogelio Martínez Furé, Zenaida Armenteros y muchos otros)...", comentó. 

La pequeña Chamely Monteagudo de solo once años de edad es otra de las integrantes de los Talleres Comunitarios del CFNC. 

"...siempre me gustó el baile, empecé en un grupo de niños que dirigen unos tíos míos y cuando supe de que aquí abrirían una 'escuelita', me presenté. 

Con la maestra he aprendido mucho de las danzas a los Orishas, del baile congo y de las danzas populares cubanas. Desde que empecé en este Taller bailo mejor y lo disfruto más... ", fue su comentario. 

"Para la familia esta ha sido una excelente oportunidad para iniciar un camino en el arte"', y así lo expresó Yudith Tejeda, madre de uno de los aprendices.

Ella es una de las más presentes en cada clase, desafiando las inclemencias del tiempo, el cansancio y las largas distancias que hay entre Marianao y El Vedado. 

"...cuando Cristian me dijo que quería venir a los Talleres me sentí muy bien. Él tenía inclinaciones por los bailes folklóricos y populares y aquí ha mejorado muchísimo. 

En estos tiempos difíciles para la juventud, donde la preferencia por los ritmos extranjeros es mayor, creo que acciones como esta son muy necesarias. 

Lo que él ha aprendido aquí le ha sido muy útil en sus presentaciones con otras agrupaciones y para varios premios en concursos de baile: Primer lugar en Columbia y segundo en Guaguancó en la más reciente edición del Festival Internacional Fiesta del Tambor". 

La joven Keyla Galarraga es una de las maestras vinculadas a estos Talleres, ella junto a la experimentada Míriam Izquierdo son artífices de los logros obtenidos durante el período. Sobre lo que representa la labor pedagógica, quien también es primera bailarina de la legendaria Compañía, comentó:

"...nunca antes tuve inclinación por la enseñanza, me veía muy lejos de eso. Pero por necesidad de la Compañía asumí esta responsabilidad y me he enamorado de ella. 

Ver a estas personas, cómo aprenden, cómo se entregan y comprometen, me hace sentir muy bien; y verlos luego en la escena, defendiendo una coreografía, me llena de orgullo. 

Esta labor exige sacrificio, porque la desempeño después de mi horario laboral y las exigencias propias de la profesión, pero me encanta. 

Ver el respeto y el cariño con que me tratan los niños y sus padres, la manera en que algunos sobresalen y ya forman parte de la "cantera" de la Compañía y lo que eso significa para ellos, es muy gratificante...", puntualizó la bailarina devenida en maestra. 

El próximo septiembre el CFNC volverá a realizar audiciones para niños, adolescentes y jóvenes con aptitudes para la danza folklórica y popular, quienes se sumarán a sus Talleres Comunitarios. 

La información oportuna será hecha pública en las redes sociales del Conjunto Folklórico Nacional de Cuba.